Crisis política

La Fiscalía de Perú abre la sexta causa por corrupción contra Castillo

La Justicia investiga al presidente por presuntas irregularidades en licitaciones de obras en su región natal de Cajamarca

El presidente de Perú, Pedro Castillo
El presidente de Perú, Pedro CastilloJuan Carlos Guzman NegriniAgencia EFE

El presidente de Perú, Pedro Castillo, aseguró ayer que un sector de la oposición política “quiere construir pruebas” para incriminarlo, después de que la Fiscalía le abriera una nueva investigación preliminar por presunta corrupción.

“Como no tienen las pruebas, se han ensañado en crearlas. Como no tienen las pruebas, quieren construirlas”, sostuvo el mandatario durante un acto en el Palacio de Gobierno con dirigentes sociales.

Castillo aseveró que un sector de la oposición va a seguir “inventando y creando acusaciones constitucionales” en su contra, pero insistió en que no lo van a “distraer”. “Mientras que mañana van a seguir quebrando a mi familia y van a querer dejar a mis hijos huérfanos, nosotros vamos a seguir empeñados en trabajar por el país”, enfatizó. “Todo ladrón piensa que somos de su misma condición”, agregó.

Castillo dio estas declaraciones horas después de que se conociera la decisión de la fiscal general, Patricia Benavides, de abrirle una nueva investigación preliminar por presuntas irregularidades en licitaciones de obras en su región natal de Cajamarca.

Con esta investigación, que también incluye al ex ministro de Vivienda y actual titular de Transportes, Genier Alvarado, la Fiscalía ya suma seis pesquisas contra Castillo, pese a que la Constitución peruana solo permite acusar al mandatario en funciones por traición a la patria y por impedir elecciones.

Esta es la quinta vinculada a su gestión y la tercera que parte de la presunción de que él es la cabeza de una organización corrupta que presuntamente actúa dentro del Ejecutivo.

Para el mandatario, estas investigaciones, que también salpican a su entorno familiar, forma parte de operación golpista, orquestada presuntamente por quienes ya trataron de arrebatarle el poder cuando se impuso en las urnas en junio del año pasado mediante acusaciones de un inexistente fraude electoral.

El martes, tras las diligencias del Ministerio Público en el Palacio de Gobierno para detener a la cuñada del mandatario Yenifer Paredes, quien se entregó el miércoles a la Justicia, Castillo afirmó ser víctima de una “confabulación entre el Congreso, la Fiscalía de la Nación y un sector de la prensa para desestabilizar el orden democrático” y “tomar el poder de manera ilegal”.

La misma insinuación hizo ayer, cuando calificó el arresto de Paredes, a quien crio y se refiere como una hija, como “parte de la lucha” y “de la vida política en el Perú”.