El forense concluye que Jay Slater, el joven que murió en Canarias el año pasado, sufrió un accidente y cayó desde 20 metros

El informe del doctor James Adeley en el Preston Coroner's Court ha detallado con precisión las circunstancias del deceso: Jay cayó entre 20 y 25 metros en el barranco Juan López, ubicado en Buenavista del Norte, sufriendo un trauma craneal instantáneo que le provocó la muerte inmediata. La identificación se realizó mediante huellas dactilares, dado que su cuerpo presentaba un avanzado estado de mummificación tras semanas expuesto al sol.

Jay Slater, un joven británico de 19 años, perdió la vida en un accidente devastador en Tenerife, tras caer desde una altura significativa en un barranco. Su muerte, ocurrida en junio de 2024, generó una extensa búsqueda que conmovió a toda la comunidad local y un año después, la investigación forense ha revelado los detalles escalofriantes de su fallecimiento, confirmando que su muerte fue resultado de un trágico accidente sin intervención de terceros. Su cuerpo había sido encontrado después de semanas de intensa búsqueda.

Circunstancias del accidente

Las pruebas toxicológicas revelaron un dato crucial: Jay se encontraba bajo los efectos de múltiples sustancias, incluyendo MDMA, cocaína y ketamina en el momento del accidente. Vídeos en sus redes sociales TikTok y Snapchat mostraban sus últimos momentos, capturando imágenes del paisaje montañoso antes de su desaparición.

La investigación destacó la ausencia de testimonios de sus amigos de viaje, lo que generó interrogantes sobre la seguridad y responsabilidad en el consumo de sustancias durante viajes a lugares desconocidos. Además, el terreno escarpado de Tenerife añadía un factor de riesgo a su situación.

La búsqueda de Jay movilizó tanto a autoridades locales españolas como a medios de comunicación británicos, generando una conmoción mediática que reflejaba la angustia de su familia y la comunidad, en una búsqueda rodeada de testimonios desgarradores describieron el proceso de búsqueda y recuperación de su cuerpo hasta que, este mes, el forense doctor Adeley ha confirmado la ausencia de cualquier indicio de intervención criminal, cerrando oficialmente la investigación.