Represión

Georgia detiene a otro líder opositor en plena ola de protestas contra el Gobierno prorruso

Nika Melia fue detenido el jueves en su coche acusado de insultar a un agente de la Policía

Nika Melia, one of the leaders of the Coalition for Change opposition group, charged with failing to appear before the Georgian parliament's temporary investigative commission, attends a court hearing in Tbilisi, Georgia on Friday, May 30, 2025. (Irakli Gedenidze/Pool Photo via AP)
El opositor georgiano Nika MeliaASSOCIATED PRESSAgencia AP

La Policía de Georgia ha detenido a un segundo líder de la oposición en pocos días, mientras continúan en el país del Cáucaso Sur las protestas contra el partido gobernante Sueño Georgiano y su postura favorable a Rusia. Los abogados de Nika Melia, uno de los líderes de la prooccidental Coalición por el Cambio, declararon que la Policía detuvo su coche el jueves.

Poco después, un numeroso grupo de personas vestidas de paisano se lo llevó. Según el Ministerio del Interior, Melia ha sido detenido acusado de insultar verbalmente a un agente de la ley. Un tribunal impuso a Melia prisión preventiva, pero no se ha aclarado la duración de ese periodo de encarcelamiento.

La detención se produce una semana después de la de Zurab Japaridze, otro dirigente de la coalición liberal prooccidental de partidos que apoyan la integración en la Unión Europea y desean el restablecimiento de las normas democráticas en el país.

Japaridze, que dirige el partido Nuevo Centro Político (Girchi), fue detenido el 22 de mayo tras negarse a comparecer ante una comisión parlamentaria que investiga presuntas irregularidades del Gobierno del expresidente Mikheil Saakashvili.

Los políticos de la oposición se han negado a asistir a las audiencias de la comisión, alegando que están motivadas políticamente por Sueño Georgiano para perjudicar a la oposición, en particular al partido Movimiento Nacional Unido de Saakashvili.

Melia, miembro del partido Ahali y expresidente del Movimiento Nacional Unido de Saakashvili, fue detenido la víspera de una vista judicial programada por no haber comparecido como testigo. Se espera que Japaridze y otros siete políticos de la oposición que no asistieron a la comisión comparezcan ante un tribunal en los próximos días.

Si son declarados culpables de no cumplir con la comisión de investigación parlamentaria, se enfrentan a una pena de hasta un año de cárcel. Mientras tanto, los manifestantes han seguido congregándose en la capital, Tiflis, para exigir nuevas elecciones y la liberación de los disidentes.

Las protestas nocturnas comenzaron el 28 de noviembre, cuando el primer ministro Irakli Kobakhidze paralizó el proceso de integración del país en la UE. Georgia ha vivido una agitación política generalizada desde las últimas elecciones parlamentarias, celebradas en octubre y ganadas por Sueño Georgiano.

Los manifestantes y la oposición del país declararon ilegítimo el resultado en medio de acusaciones de fraude electoral con ayuda de Rusia, lo que desencadenó semanas de protestas en todo el país. En aquel momento, los líderes de la oposición prometieron boicotear las sesiones del Parlamento hasta que se celebraran unas nuevas elecciones parlamentarias bajo supervisión internacional y se investigaran las supuestas irregularidades.

El Sueño Georgiano ha sido objeto de una condena generalizada por parte de líderes europeos y grupos internacionales de defensa de los derechos humanos por su brusca actuación con los manifestantes y su aparente retroceso democrático.