Argentina

Milei «limpia» la Quinta de Olivos para liberarla de la «mala energía»

El presidente argentino se muda a su residencia oficial sin sus «perrihijos» y sin aclarar quién pagará la factura del Hotel Libertador

FILE- Argentina's newly sworn-in President Javier Milei speaks outside the Congress in Buenos Aires, Argentina, Dec. 10, 2023. Milei has drastically cut spending to end the fiscal deficit and contain inflation of almost 161% annually, including devaluing the peso more than 50%, dismissing public employees, suspending public works and reducing transportation and energy subsidies. (AP Photo/Gustavo Garello, File)
Un mes de estancia de Javier Milei en la suite presidencial del Hotel Libertador de Buenos Aires cuesta 10.500 dólaresASSOCIATED PRESSAgencia AP

Pasadas las Navidades, el lunes Javier Milei abandonó el Hotel Libertador, que ha sido su hogar en los últimos tres meses, y se mudó finalmente a la Quinta de Olivos, la residencia habitual de los jefes de Estado argentinos. Lo hizo sin sus cuatro «hijitos de cuatro patas», como llama a sus perros de raza mastín inglés. Sucede que todavía no están listos los enormes jaulas con paredes reforzadas que mandó construir sobre una antigua caballeriza. «Los mastines son muy grandes. Milton [uno de los perros] mide dos metros en dos patas y pesa 100 kilos, y la casa no es una construcción muy fuerte, ellos pueden derribar paredes», describió Milei. Por ahora, sus «perrihijos» seguirán viviendo en una guardería.

El nuevo hogar presidencial está situado en la zona norte del Gran Buenos Aires, donde Milei, tal como lo había anunciado, ya empezó a trabajar la mayor parte de la semana a excepción de los martes y jueves, días en los que encabezará las reuniones de Gabinete en la Casa Rosada. Para trasladarse hasta allá y volver lo hará en automóvil y no en el helicóptero presidencial, como solía hacerlo la expresidenta Cristina Kirchner.

Se dice que la hermana y secretaria presidencial, Karina Milei, quien tiene mucha afinidad con el esoterismo, mandó «limpiar» la nueva residencia para liberarla de la «mala energía» acumulada sin duda a lo largo de los años. La propiedad ha sido hogar de 15 familias presidenciales en los últimos 60 años. Ahí enfermaron y murieron tres presidentes, entre ellos Juan Perón. «Desde allí partió el 1 de julio de 1974 el cortejo fúnebre que paralizó el país y hacia allí regresó su cuerpo. Meses más tarde se sumó a la cripta el cuerpo de Eva Perón, que regresaba al país luego de un macabro recorrido iniciado en 1957», reseña el autor Felipe Pigna sobre las intimidades de la quinta presidencial. Al tomar el poder, el dictador Jorge Videla se negó a mudarse hasta que los cuerpos de Perón y Evita no fueran enviados a un cementerio.

En entrevistas pasadas Milei ha confesado que no sabe si su pareja, Fátima Flórez, se mudará o no a la Quinta de Olivos. «Somos una pareja de pocos meses», declaró alguna vez. Los que sí se mudarán ahí en pocos días serán su hermana y sus cuatro perros. Es posible que se trasladen también sus dos ministros más influyentes, Milei los quiere tener cerca durante sus días de trabajo y ante cualquier urgencia. Ellos son el jefe de gabinete, Nicolás Posse, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovelo, quienes ocuparían los dos chalets contiguos que también se mandaron reformar y que son una especie de casas de huéspedes en el terreno de 35 hectáreas.

Tras la mudanza de Milei, se generó toda una polémica en el país por saber quién pagó o pagará las cuentas del lujoso hotel Libertador de cuatro estrellas, ubicado en el centro bonaerense. Milei lo estableció como su búnker y se alojó ahí como candidato en la segunda vuelta desde mediados de octubre y siguió ya como electo presidente por casi un mes más, sin que haya registro oficial de sus visitantes en esos primeros días decisivos como presidente. Su presencia hizo que el hotel de 193 habitaciones y siete suites reflotara su demanda y en los últimos meses tuvo un 100% de ocupación. El Hotel Libertador es propiedad del grupo IRSA, cuyo dueño es el empresario Eduardo Elsztain, amigo del presidente Milei y uno de los donantes de su campaña. Lo acompañó en primera fila en la asunción de mando y fue, según diversas fuentes periodísticas, quien vinculó al líder libertario con la organización judía ortodoxa Jabad Lubavitch, de la cual Milei se ha mostrado fanático. Justamente antes de asumir su mandato, el empresario de origen judío acompañó a Milei en su viaje a Nueva York, y lo llevó hasta la tumba del rabino Menachem Mendel Schneerson, considerado milagroso. Otras versiones sospechan que Elsztain junto a otros empresarios fueron los que acercaron a decenas de estudios de abogados que trabajaron para redactar en tiempo récord el DNU desregulador y que, según la oposición, termina beneficiando a los grandes grupos económicos.

Según la web del Hotel Libertador, una noche en la «suite» presidencial, donde se hospeda Milei (sin contar el resto de habitaciones que ocuparon sus colaboradores) tiene un coste cercano a los 350 dólares. Es decir, que un mes de hospedaje en esa suite del exclusivo hotel ronda los 10.500 dólares, casi 9 millones de pesos. Y Milei se alojó ahí casi tres meses.

El diputado del Frente de Todos Rodolfo Tahiljade contó con sorna en sus redes sociales que el 19 de diciembre pidió información pública ante la secretaría general de la Presidencia, que encabeza Karina Milei, «para saber si el hotel Libertador que ocupa el Presidente de la Nación lo paga Elsztain, la casta, el bolsillo de Milei, Conan, o lo estamos pagando todos los argentinos».

Se cuestiona que si Milei pagó o pagará de su bolsillo con qué fondos lo hará si se sabe que ha rifado sus sueldos de diputado durante los últimos meses. Salvo que haya usado sus ahorros. Y si la estancia del presidente en el hotel Libertador se trató de una «donación» de su amigo Elsztain, también resulta polémico, ya que las donaciones están prohibidas en la Ley de Ética Pública argentina, lo que podría traerle problemas.

Ni el portavoz presidencial, Manuel Adorni, supo responder en conferencia de prensa la pregunta de los periodistas sobre quién pagó la estadía de Milei en el Hotel Libertador. Quedó en averiguarlo y hasta ahora no hay ninguna información oficial. Lo que sí ha habido es el nombramiento oficial de un alto ejecutivo de IRSA como funcionario público al frente de la Agencia de Bienes del Estado, organismo que administra y vende los bienes y predios estatales. Este hecho ha sido criticado por algunos medios y por la oposición al considerar que Milei empieza a pagar los favores de la empresa que le dio techo y comida en sus ardorosos días de campaña y en sus primeras semanas como Presidente.