Acoso callejero

Policías británicas se hacen pasar por corredoras para combatir los 'piropos callejeros': ya hay 18 detenidos

La operación encubierta responde a las necesidades de seguridad de las mujeres que se ejercitan en espacios públicos

Policia británica
Policia británicalarazonLa Razón

La policía de Surrey, en Inglaterra, ha implementado una operación pionera para combatir el acoso callejero durante el ejercicio. Oficiales disfrazadas de corredoras han logrado arrestar a 18 personas en zonas identificadas como puntos críticos de agresión verbal y acoso.

Esta iniciativa surge como respuesta directa a la alta incidencia de intimidación que sufren las mujeres durante sus rutinas de entrenamiento. El programa busca desarticular comportamientos que limitan la libertad de movimiento femenino en espacios públicos.

El inspector Jon Vale ha revelado datos alarmantes sobre la situación actual. Según una encuesta local, casi la mitad de las mujeres que corren en el condado no denuncian los acosos que experimentan. El catcalling, que consiste en una forma de acoso callejero basado en comentarios, silbidos y otros gestos realizados en espacios públicos, se ha convertido en un problema sistemático que trasciende la simple molestia y puede escalar hacia agresiones más graves.

La estrategia busca ir más allá del arresto

Las oficiales encubiertas desplegaron una estrategia meticulosa durante un mes completo. Equipadas con ropa deportiva, realizaban jogging en rutas previamente identificadas como zonas de alto riesgo, mientras unidades especializadas permanecían alertas para intervenir inmediatamente ante cualquier manifestación de acoso.

En los primeros minutos de la operación, ya se registraron comportamientos inapropiados. Una oficial recibió un bocinazo, y segundos después, otro vehículo se detuvo realizando gestos intimidantes. Estos incidentes confirmaron la urgencia de la intervención policial.

La estrategia contempla un doble abordaje. Para infractores primerizos, se implementarán programas de educación sobre comportamiento respetuoso. En casos más graves o de reincidencia, se aplicarán las máximas consecuencias legales posibles.

Esta iniciativa se enmarca en una tendencia nacional tras casos emblemáticos como el asesinato de Sarah Everard en 2021. Diferentes fuerzas policiales del Reino Unido están adoptando estrategias innovadoras para garantizar la seguridad de las mujeres en espacios públicos.