Cumbre de La Haya

Trump abre la puerta a enviar "Patriots" a Ucrania tras reunirse con Zelenski

El presidente ucraniano queda relegado sin participar en las sesiones de la cumbre de la OTAN

Donald Trump estrecha la mano del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en La Haya
Donald Trump estrecha la mano del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en La HayaUKRAINIAN PRESIDENTIAL PRESS SERVICE EFE/EPA

Donald Trump y Volodimir Zelenski han mantenido su tercer encuentro desde que el magnate volviera a la Casa Blanca. Ha sido un encuentro de unos 50 minutos y mucho menos convulso que el primero, cuando Trump humilló al presidente ucraniano en unas imágenes que dieron la vuelta al mundo.

Todo indica que la sangre no ha llegado al rio. “Hemos cubierto todas las cuestiones realmente significativas”, ha asegurado Zelenski vía redes sociales. El mandatario ucraniano también ha valorado la “atención y la disponibilidad de ayudar a traer la paz” que está mostrando el presidente de Estados Unidos.

A pesar de que el ambiente ha sido mejor que tras la primer cita, lo cierto es que Zelenski ha tenido que conformarse con migajas. La coreografía de esta cumbre ha sido muy diferente de la dos precedentes celebradas en Vilna (Lituania) y Washington (Estados Unidos). En esta ocasión, Zelenski no ha participado en las sesiones oficiales de la Alianza tan solo ha asistido a la recepción organizada por la Casa Real Holandesa en una cena de gala celebrada el martes.El habitual foro entre Ucrania y la OTAN también ha sido relegado a un encuentro de ministros de Exteriores, no de jefes de Estado como era habitual, y la declaración final tan solo menciona a Ucrania de manera somera.

Pero podría haber sido peor. Trump incluso ha abierto la puerta a comprar los sistemas de defensa aérea Patriots y está dispuesto a volver a hablar con Putin. De todas formas, no hay compromisos en firme ya que el propio inquilino de la Casa Blanca ha asegurado que los patriots “son muy difíciles de conseguir”, pero vamos a ver “si están disponibles”.

Aunque Trump prometió terminar con la guerra en 24 horas, la realidad se ha mostrado tozuda y las negociaciones de paz auspiciadas por Estados Unidos y en las que la Unión Europea ha resultado marginada parecen en punto muerto. A pesar de los sucesivos rumores y elucubraciones, Putin y Zelenski no han llegado a mantener un encuentro. Trump no ceja en su empeño de seguir mediando “Voy a hablar con (el presidente ruso) Vladímir Putin para ver si podemos poner fin a la guerra", ha declarado tras recordar el número de muertos en los últimos ataques. “Es una locura, es una locura. Ahora hablaré con Putin. He tenido una buena reunión con Zelenski, y he tenido muy buenas reuniones", ha remarcado Trump.

Pero no solo se trata de palabras sino también de compromisos contantes sonantes. En la declaración final aprobada en esta cumbre, Ucrania ha tenido que conformarse con cuatro líneas breves. “Los aliados reafirman sus compromisos soberanos duraderos de brindar apoyo a Ucrania, cuya seguridad contribuye a la nuestra, y, con este fin, incluirán contribuciones directas a la defensa de Ucrania y a su industria de defensa al calcular el gasto de defensa de los aliados”, asegura el texto.

Ha sido muy llamativo que en esta ocasión no haya ningún tipo de referencia a la posible membresía de Ucrania en la OTAN. Una petición de Estados Unidos que los aliados han respetado.

En la cumbre celebrada en Vilna hace dos años se consensuó “superar” el lenguaje de la cumbre celebrada en Bucarest en 2008 en la que por primera vez se abría la puerta a que Ucrania formara parte de la Alianza, aunque esta promesa nunca estuvo acompañada de pasos concretos debido a la oposición de Francia y Alemania. En la cita de Washington, que tuvo lugar hace un año, los aliados prometieron al país invadido que el camino para que Ucrania se adhiera a la OTAN es” irreversible”. Una fórmula que se interpreta como la posibilidad de que el país ingrese en la alianza militar cuando termine la guerra, aunque sin plazos claros. Esta coletilla ha dejado de aparecer. A pesar de esto, el secretario general de la Alianza ha quitado importancia a esta ausencia y en las declaraciones ante la prensa ha vuelto a mencionar que la adhesión de Ucrania ante la OTAN es “irreversible”.

El primer encuentro entre Trump y Zelenski tuvo lugar el pasado 28 de febrero en un tono bronco, inusual en las relaciones internacionales ,que se saldó con la cancelación de la rueda de prensa. Trump acusó al presidente ucraniano de no estar siendo lo suficientemente agradecido con Estados Unidos y no querer terminar con la guerra. “Usted está jugando con las vidas de millones de personas, usted está jugando con la Tercera Guerra Mundial, y lo que está haciendo es muy poco respetuoso hacia este país", llegó a asegurar el presidente de Estados Unidos.

El segundo encuentro se produjo durante el funeral del Papa Francisco en la cúpula del Vaticano. Una cita que fue bastante mejor, lo que no era muy difícil. “El presidente Trump y el presidente Zelenski se reunieron en privado hoy y tuvieron un encuentro muy productivo", señaló el director de comunicación de la Casa Blanca, Steven Cheung, en una breve declaración.

"Una buena reunión. Hemos hablado mucho cara a cara. Esperamos resultados en todo lo que hemos cubierto. Proteger las vidas de nuestra gente. Un alto el fuego completo e incondicional. Una paz sólida y duradera que evite otra guerra. Una reunión muy simbólica que tiene potencial de resultar histórica, si se consiguen resultados conjuntos", escribió el mandatario ucraniano en sus redes sociales.