Política

ERC

Maragall (ERC) frena las negociaciones con Colau por la vía “paralela” con el PSC y el eventual apoyo de Valls

Nuevo movimiento en forma de ultimátum después de que Colau insista en el “tripartito” con Collboni

El candidato republicano, Ernest Maragall
El candidato republicano, Ernest Maragalllarazon

Nuevo movimiento en forma de ultimátum después de que Colau insista en el “tripartito” con Collboni

Nuevo movimiento en forma de ultimátum de Ernest Maragall. El candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona ha suspendido las negociaciones con Ada Colau al ver que la alcaldesa en funciones insiste con un “tripartito” que incluya al PSC. “Mientras los comunes no definan su posición abriremos un paréntesis en los contactos con ellos”, ha asegurado el republicano en rueda de prensa.

“No rompemos nada, pero vamos a esperar que los comunes se definan”, ha advertido tras rechazar de forma tajante un bloque “a tres bandas”.

Maragall también se ha referido a la posibilidad de que Colau y el PSC contaran con los votos de la plataforma de Manuel Valls para llegar a la alcaldía. “Barcelona en Común debe escoger entre un proyecto de ciudad o un gobierno supeditado al señor Valls”, ha sentenciado.

En su oferta de gobierno al 50% entre Esquerra y la plataforma de la ex activista, el republicano ha incorporado hoy una nueva pieza: “una nueva figura de máximo rol y nivel junto a la alcaldía” para la propia Colau. “Estoy convencido de que seremos capaces de encontrarla”, ha resumido Maragall pidiendo, eso sí, que la alcaldesa en funciones se aleje definitivamente del PSC, que ha definido como una “sucursal de la Abogacía del Estado”.

Un nuevo giro que llega después de que Ada Colau se postulara claramente a favor de un “tripartito” para la capital catalana con Barcelona en Comú, Esquerra (formación que ganó las elecciones) y el PSC. Así lo ha confirmado la propia alcaldesa en funciones a través de un vídeo difundido en las redes sociales en el que ha reiterado que las izquierdas suman 28 concejales, “más del 60% de los votos” tras el 26-M.

"La mayoría de barceloneses piden claramente que superemos ya la política de bloques, de exclusiones y vetos, las líneas rojas, y que iniciemos una nueva etapa de diálogo y de no confrontación", ha asegurado la ex activista hablando abiertamente de “tripartito” con republicanos y socialistas. Es más, Colau apuesta por un pacto entre las tres fuerzas para conseguir una “gobernanza con políticas de izquierdas estable para todo el mandato” y no sólo para la investidura.

De hecho, la alcaldesa en funciones critica los “vetos cruzados” entre ERC y PSC y los atribuye a futuras estrategias electorales ante una hipotética convocatoria electoral a nivel autonómico. "A nadie se le escapa que en pocos meses se prevé que haya elecciones en Cataluña. ERC tiene una estrategia clara de ir a por los votos de JxCat, la antigua Convergència, y, por otra parte el PSC está en una ofensiva para recuperar muchos votos que se habían ido hacia Ciutadans". “Son estrategias legítimas”, ha radiografiado Colau antes de advertir, eso sí, que la ciudad de Barcelona “es lo más importante” y debe colocarse “por delante de todo”.

“En muchos sitios están hablando entre ellos. ¿Por qué no en Barcelona?”, ha lanzado Colau en un intento de trasladar la presión a socialistas y republicanos. La ex activista ha negado también cualquier negociación con Manuel Valls ni con Junts per Catalunya.