El centro juvenil de Puente de Vallecas toma forma

Era una reivindicación de los vecinos de Puente de Vallecas. Y especialmente de los más jóvenes. Un espacio donde puedan participar, desarrollar acciones que respondan a sus intereses, prevenir situaciones de riesgo y contribuir a la autonomía y autogestión de los espacios públicos por parte de este colectivo. Hablamos del Centro Juvenil en el número 15 de la calle Río Esmeralda, cuyos trabajos para ponerlo en pie han comenzado recientemente y que abarcarán los próximos nueve meses.

Con un presupuesto de 1.612.300 euros, el proyecto corre a cargo del Área de Obras y Equipamientos que dirige Paloma García Romero y fue tramitado por el Consistorio anterior en marzo de 2019. El Centro Juvenil se levantará en una parcela de 1696,78 m2 y constituirá un edificio organizado en dos plantas, aprovechando el desnivel existente entre el terreno y las calles circundantes.

¿Por qué es importante que este centro vea la luz? Según consta en la memoria del proyecto, a fecha de 1 de enero de 2018 había empadronadas en el distrito de Puente de Vallecas alrededor de 230.488 personas, siendo el 85,5% de nacionalidad española y un 15,02% extranjera, principalmente de origen latino. Su población ha aumentado en los últimos años y es previsible que siga haciéndolo debido a que es uno de los distritos con el precio de alquiler más bajo en la ciudad de Madrid. En Puente de Vallecas viven cerca de 33.000 menores de 18 años, lo que supone el 14,3% de su población, y es el distrito que cuenta con los indicadores de riesgo más altos de la ciudad, afectando especialmente a los grupos más vulnerables como los jóvenes.

Desde el 1 de diciembre de 2017, Puente de Vallecas cuenta con un programa de intervención socioeducativa con menores y adolescentes en situación de riesgo. Con esta intervención se ha podido constatar que el principal problema de los menores es la conflictividad familiar, el riesgo de consumo de sustancias tóxicas, la pertenencia a grupos de riesgo, el fracaso y absentismo escolar y el ocio no saludable. La memoria del proyecto indica que «la llegada de población inmigrante, así como la reagrupación familiar, ha supuesto también el aumento de casos de menores con problemas de integración y adaptación social, debido por un lado a los cambios educativos, sociales y culturales, y a las rupturas familiares, en algunos casos por el sentimiento de abandono, así como por la ausencia paterna por las jornadas laborales extensas». En definitiva, una serie de problemas que este Centro Juvenil puede ayudar a paliar.

En los trabajos que ahora se llevan a cabo, la planta superior del edificio se ha nivelado con la calle Lago Maracaibo –límite norte de la parcela–, mientras que la otra planta se nivela con el acceso desde la calle Río Esmeralda. Se podrá acceder al edificio por cualquiera de los dos niveles, ya que debido a la diferencia de cotas del viario circundante quedará a nivel de la calle Lago Maracaibo por el Norte y al nivel de Río Esmeralda por el sur. En el interior de la edificación se ha creado un patio de 3,00 por 8,62 metros, que facilitará la ventilación cruzada de todas las estancias, a lo largo del eje transversal y del longitudinal del edificio. La fachada norte se retranqueará cinco metros, formando un patio inglés ajardinado, que se salva en el acceso a través de una pasarela. Este patio posibilitará la ventilación cruzada transversal en la planta inferior. Mientras, la mayor parte de la primera planta será diáfana. Delante de su fachada sur se ajardinará la franja contigua al campo de deportes existente.

Proyectos musicales

Una de las actividades que previsiblemente se pondrán en marcha en el centro una vez que se inaugure será la posibilidad de que los jóvenes de Puente de Vallecas emprendan proyectos musicales. Así, en el nivel con acceso por la calle Maracaibo, con 584,53 m2 , se localizarán, además del vestíbulo de entrada y la conserjería, dos salas de ensayo, un estudio de grabación y dos aulas. Mientras, en el nivel inferior, se situarán un vestíbulo, una sala multiusos y varios camerinos. De hecho, está proyectada la instalación para dotar de suministro de infraestrucura de telecomunicaciones al edificio, constando de los elementos necesarios para satisfacer funciones de radiodifusión sonora y televisión terrenal, así como a través de satélite.

En cuanto a otras cuestiones técnicas, la producción de agua caliente sanitaria se realizará mediante una bomba de calor. Este equipo será alimentado eléctricamente, ya sea desde la red o desde la instalación fotovoltaica de autoconsumo. Los encendidos de las escaleras, aseos, pasillos y de los vestíbulos serán mediante detectores de presencia.

Los circuitos de alumbrado exterior se han dotado de contactores accionados por un reloj astronómico. Además, el edificio contará con un campo de captadores solares en la cubierta del edificio. El sistema de captación solar se realizará mediante un sistema de drenaje automático y utilizando como sistema de energía auxiliar una bomba de calor con de recuperación de calor.

Aumento de servicios

Hay que recordar que el distrito de Puente de Vallecas cuenta con un tejido asociativo muy fuerte, de amplia trayectoria, y que ha ido generando una red de atención a la población juvenil, confirmando la necesidad de aumentar los servicios a esta franja de la población, principalmente con carácter preventivo.

Así, y como figura en la memoria del proyecto, el contexto socioeconómico y demográfico de Puente de Vallecas, así como las necesidades específicas detectadas por los servicios públicos y entidades en la población juvenil, hacían necesaria la existencia este centro juvenil. Si los plazos son los esperados, sus puertas abrirán a partir de la próxima primavera.