El Ayuntamiento de Madrid está haciendo “todo lo posible para llegar cuanto antes” a un acuerdo con los comerciantes para lograr la reapertura del Rastro, emblemático mercadillo madrileño que lleva cerrado desde el pasado mes de marzo. Así, para mañana está prevista la reunión de los técnicos municipales con representantes de los vendedores ambulantes, con la esperanza de que se “cierren” los flecos pendientes. Así lo ha anunciado la portavoz municipal, Inmaculada Sanz, durante su comparecencia en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.

A la pregunta de si sería posible reabrir el mercadillo este domingo, el Ayuntamiento no lo ha concretado, ya que hay que llevar a cabo "bastantes actuaciones previas”. En todo caso, sí que han dejado la puerta abierta para que la semana que los puestos ya estén disponibles.

Cerca del 60% de los vendedores ambulantes votaron a favor de la última propuesta del Ayuntamiento, pero con una excepción: el apartado sobre “características de los puestos”, que asegura que la instalación y colocación de la cinta de balizamiento corresponde a cada vendedor. Los vendedores alegan que “la delimitación del dominio público correspondería a las autoridades competentes”.

En este sentido, Sanz ha recordado que, “de forma excepcional”, el Consistorio se hará cargo del conteo del aforo. Un aspecto, ha dicho, que, en realidad, debería ser competencia de los comerciantes.