Llega a la capital el contenedor naranja: solo para aceite

Los objetivos medioambientales marcan el paso. Del consumo responsable a los alimentos de proximidad, pasando por una gestión de los inevitables residuos. Para estos últimos, después de la batalla en favor del reciclaje del cristal o el papel, llega el aceite. De ahí el empeño del Ayuntamiento de Madrid, que hará que la ciudad cuente, en el primer trimestre del año que viene, con un nuevo elemento urbano: el contenedor de aceite vegetal. El Consistorio da un paso más en la gestión de los residuos y la sostenibilidad de la ciudad y, como avanzó el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, en la comisión del ramo, la capital contará con este nuevo servicio tras la adjudicación del contrato que se acordó por decreto el pasado 7 de octubre para la recogida, mantenimiento y gestión del aceite de procedencia doméstica.

Un residuo este que, casi siempre, acaba contaminando las aguas residuales de la ciudad, durante mucho tiempo, al ser difícil de eliminar. Algo ciertamente incomprensible, pues el aceite vegetal usado es un residuo con valor económico, con el que se puede fabricar biodiésel o jabón. Es valioso. De ahí que el tipo de contrato firmado es de ingresos, por lo que el Ayuntamiento recibirá dinero. Este contrato ha sido firmado con la empresa ECO OLEUM S.L por haber sido la oferta más elevada. Exactamente 40,03 euros por contenedor al año. El método de pago son abonarés, que no se expedirán durante los primeros seis meses por considerarse un periodo de carencia para la implantación del servicio. Un servicio novedoso y al que los ciudadanos deberán acostumbrarse.

La Administración situará 578 contenedores en zonas de uso público para este líquido usado. Hasta ahora no existían depósitos exclusivos para el aceite en calle, pero sí en puntos limpios y mercadillos, donde se llegaron a recoger en el año 2019 178.600 litros de aceite vegetal, un 11,62% más que en el año 2018, por lo que se prevé un incremento sustancial de recuperación del residuo. Todo ello posicionará a Madrid como una ciudad aún más comprometida con el reciclaje y la economía circular.

El Ayuntamiento, además, repartirá 5.300 embudos de plástico reutilizable a los ciudadanos que lo deseen. Se podrán obtener en los puntos limpios, en acciones puntuales de comunicación y en las juntas de distrito. Aquellas comunidades de vecinos que tengan más de 200 residentes o más de cien viviendas podrán instalar un contenedor y se incluirá el servicio de recogida de manera gratuita. El «naranja» ha llegado a la ciudad. Para quedarse.