Tráfico

Controles a los autobuses en Madrid a la puerta del colegio

Agentes de la Policía Municipal intensifican en estos días la vigilancia sobre los vehículos escolares. Las infracciones suelen ser leves, como la falta de documentos o de carteles informativos

Control de policía para autobuses escolares en Madrid.
Control de policía para autobuses escolares en Madrid.Gonzalo Pérez MataLa Razón

Cada día, miles de alumnos madrileños llegan hasta su centro escolar en autobús. Un medio de transporte que también está sujeto a controles. Y el Ayuntamiento de Madrid, a través de la Policía Municipal, desarrolla diversas campañas específicas para estos vehículos, como, por ejemplo, la desplegada esta semana, del 19 al 23 de septiembre, promovida por la Dirección General de Tráfico.

Los agentes de la Unidad de Servicios Especiales de la Policía Municipal se ha de emplear a fondo en esta labor ante la realidad de que, como todas las grandes ciudades, Madrid está abarrotada de tráfico. «Las campañas no predisponen de una fecha determinada, tampoco horarios concretos, aunque sí suelen ocurrir a principio de año y al inicio escolar. Pese a que se encuentren algunas infracciones, en general, el transporte escolar no suele dar problemas. En caso de haberlos, suelen ser leves, como la falta de algún documento o de carteles comunicativos», señala a LA RAZÓN uno de los agentes que forma parte de este tipo de operativos en la capital.

Control de policía para autobuses escolares en Madrid.
Control de policía para autobuses escolares en Madrid.Gonzalo Pérez MataLa Razón

Uno de los centros en los que se realizó ayer este control fue el Colegio Estudio (Aravaca), que cuenta con 1.850 alumnos y 700 de ellos acuden a través del transporte escolar. Su director, Ignacio, explica que se ofrecen rutas por toda la capital y llegan hasta Torrelodones: «En mis 25 años de profesión, la colaboración con la policía municipal y los servicios que realizan ha sido siempre exquisita», destaca. Allí se procedió a un primer filtro: documentación y observación previa de la policía a los conductores. Posteriormente, los redirigen para realizar el control más minucioso: extintores, pruebas aleatorias de alcoholemia, inspección de documentación etc.

Según la experiencia de estos agentes, una de las infracciones detectadas durante la mañana fue la falta de constancia documental de la colaboración con otra empresa: «Cuando se consigna la colaboración de una empresa con otra tienen que indicar qué tipo de servicio realizan, en este caso sería uno discrecional con transporte regular de uso especial; sin embargo, el conductor no lo indicó y es una mala confección de la hoja de ruta. La penalización en principio es una sanción cuantificada en 300 euros. Siempre, la responsable que se haría cargo es la empresa titular del vehículo».

Los servicios especiales frecuentan colegios que presenten un alto volumen de rutas por la especificidad de su unidad. También cuentan que lo que buscan es molestar lo menos posible: «Esperamos a que los autobuses se encuentren descargados para proceder a la inspección. Se puede hacer tanto a la hora de entrada como a de salida del colegio, intentamos que no sea algo mecánico que pueda ahuyentar a aquellos vehículos o conductores que no vayan acorde a la normativa», aseguran los agentes. «No queremos entorpecer».

Estas campañas de seguridad vial ejercen principalmente una labor preventiva, con presencia de patrullas de distintas unidades, vigilando y controlando los movimientos de los vehículos o circunstancias del tráfico según el objetivo de cada campaña. En lo que va de año se han desplegado campañas de seguridad vial específicas sobre camiones y autobuses, prevención de atropellos, bicicletas y vehículos de movilidad urbana (VMU), control de la velocidad, utilización del cinturón de seguridad y sistemas de retención infantil, motocicletas, personas de movilidad reducida, alcohol y drogas, etc. Algunas son impulsadas por la propia Policía Municipal y, en otras, se une a las promovidas por la DGT. Los incumplimientos más significativos en materia de circulación que detecta la Policía Municipal en los controles generales de seguridad vial corresponden, en el caso de los vehículos de cuatro ruedas, a la conducción utilizando manualmente los teléfonos móviles y navegadores y a no llevar puesto el cinturón de seguridad; mientras que, en las motocicletas y ciclomotores, a su mal estacionamiento. La campaña de esta semana afecta al conjunto de las vías de la capital, y se encargan del operativo las Comisarías Principales de la Zona Este y Oeste, así como la Comisaría Principal de Policía Judicial y de Seguridad (en la que se incluyen las Unidades de Policía Judicial y de Tráfico y la Unidad de Servicios Especiales). Los agentes encargados actúan en sus respectivos ámbitos territoriales y en los centros escolares ubicados en su distrito de destino. Además de los cientos de controles en el marco de estas campañas, Policía Municipal también habilita otros muchos específicos para detectar entre los conductores alcoholemias (más de 60.000 pruebas en lo que va de año) y drogas (unos 500 en los primeros meses de 2022).

Entre enero y julio la Policía Municipal ha detenido e investigado a más de 2.100 personas por delitos contra la seguridad vial en Madrid. A finales de 2021 se puso en marcha un plan estratégico de seguridad previsto hasta 2033 para prevenir accidentes y mejorar la seguridad vial.