Obras

La reforma del Palacio de Congresos de la Castellana se demora: el Gobierno no mueve ficha

Empresarios madrileños exigen a Industria que saque a licitar la reforma, anunciada hace nueve meses. Por el momento, solo se han iniciado las obras de la nueva sede de la OMT. Queda aún un 75 % por ejecutar

Así será el nuevo Palacio de Congresos de la Castellana
Recreación del futuro proyectoCAM

A finales del pasado mes de agosto, saltaba la noticia: el Palacio de Congresos del 99 del Paseo de la Castellana, después de una década en silencio, volvía a la vida. Propiedad del Instituto de Turismo de España (Turespaña), organismo adscrito al Ministerio de Industria, y suspendido de actividad desde finales de 2013, el Ayuntamiento de Madrid había concedido al Gobierno central la licencia para su reforma. En esencia, el Ministerio ampliaba los edificios A y C del complejo, lo que supondrá una actuación sobre 25.902 metros cuadrados, y que irán destinados a ser el Palacio de Congresos. En lo que respecta al edificio B, también sería remodelado, en su caso para acoger la sede de la Organización Mundial del Turismo (OMT): 9.000 metros cuadrados, 7.700 reformados y más de 1.000 de nueva construcción.

Bloqueo

Sin embargo casi nueve meses después de aquel anuncio, lo cierto es que la reforma del palacio de la Castellana solo se ha iniciado en un 25%: lo concerniente a la nueva sede de la OMT. Así lo ha dado a conocer Madrid Foro Empresarial, entidad que reúne a más de 350 socios. En un comunicado, recuerdan el bloqueo de esta reforma y piden «a la recién nombrada Secretaria de Estado, Rosario Sánchez Grau, que antes de que termine este mes de mayo 2024, saquen a concurso público internacional la remodelación y gestión del 75% de la parcela». Hay que tener en cuenta que ese sería solo el primer paso para acometer la reforma, y que de ese proceso, saldría la empresa adjudicataria.

En conversación con LA RAZÓN, Hilario Alfaro, presidente de Madrid Foro Empresarial, recuerda que la entidad mantuvo una reunión con la anterior secretaria de Estado de Turismo, Rosana Murillo. En dicho encuentro, el Gobierno les aseguró que, para este mes de mayo, saldría adelante la licitación. Sin embargo, los cambios de Pedro Sánchez en el Ministerio de Industria y Turismo, con la llegada de Jordi Hereu, provocaron también un cambio en la Secretaría de Estado, que pasó a ser presidida por Rosario Sánchez el pasado mes de abril. Así, desde Madrid Foro Empresarial consideran que estos cambios de cartera han provocado la demora de «un proyecto fundamental para Madrid».

La importancia de reabrir el Palacio de Congresos, apuntan desde la entidad, está ligado a la enorme oferta de congresos reinante en la ciudad de Madrid. El pasado diciembre, la capital ganaba, por quinto año consecutivo, los World Travel Awards, lo que distinguía a la ciudad como líder en turismo de congresos y reuniones, por delante de Abu Dabi, Las Vegas, París, Seúl o Singapur. Este mismo año, la concejala delegada de Turismo y presidenta de Madrid Convention Bureau (MCB), Almudena Maíllo, daba a conocer algunas cifras que ponían de relieve el retorno económico de esta posición: el impacto directo para la ciudad fue de 2.327 millones de euros el pasado año, cifra que supone un incremento del 35,6 % respecto a 2022 y del 19,8 % frente a 2019, según datos de la consultora Braintrust. La repercusión económica asciende a los 5.238 millones de euros si se tiene en cuenta el impacto indirecto. Y el gasto medio registrado en este perfil de viajero internacional rozaba los 1.600 euros.

Muchos de esos congresos, a día de hoy, tienen un único gran punto de encuentro: Ifema. Por eso, y ante ese «monopolio», Alfaro considera que «Madrid necesita otra locomotora que compita y que atraiga nuevos congresos». Y el hecho de que el proyecto de la Castellana esté ahora mismo «abandonado» es un lujo que la capital no se puede permitir. De ahí que Madrid Foro Empresarial «exija al Ministerio de Industria y Turismo que cumpla con los plazos acordados».

Un mural valioso

En lo que se refiere a los trabajos que sí están en marcha y que corresponden al edificio B, los plazos de ejecución de esa nueva sede de la OMT están estimados en 18 meses, de acuerdo a lo indicado en el acta correspondiente de la Plataforma de Contratación del Estado. Todo ello a cargo de la constructora Ferrovial, con un contrato de 21,4 millones de euros (17,7 millones sin impuestos). Según reza el proyecto, se buscará un lenguaje arquitectónico contemporáneo, que se diferencie clara, pero con discreción, del mural diseñado por Joan Miró. Por otro lado, la cubierta contará con claraboyas para facilitar la iluminación natural.

Precisamente, ese mural de Miró que preside el edificio fue uno de los motivos, según el Ayuntamiento de Madrid, por los cuales el Consistorio tardó más tiempo del previsto en conceder la licencia de obra. Presente en la fachada desde 1980, este mural de azulejos, diseñado por Miró y ejecutado por el ceramista Llorens Artigas, cuenta con una declaración BIC (Bien de Interés Cultural). De hecho, también va a ser restaurado, con un presupuesto de 450.000 euros. Con vistas a «ajustarse» a las exigencias de la Comisión para la Protección del Patrimonio, la licencia se demoró más de la cuenta.

Por su parte, los edificios A y C irán destinados a ejercer de salas para congresos y reuniones. Y es que desde su nacimiento, el edificio, inaugurado en 1970 por el entonces Príncipe Juan Carlos, albergó desde el primer festival de la OTI de 1972 hasta el centro de prensa del Mundial de España 82. Posteriormente, un incendio, a mediados de la década de los noventa, provocado según las investigaciones, destruyó la zona norte y supuso un punto de inflexión en su historia. Su cierre, en principio, se produjo para adecuar las instalaciones a la normativa de seguridad vigente. Sin embargo, poco a poco, fue cayendo en el más absoluto de los olvidos.