Carne, leche y huevos sí, pero más sotenibles

La Organización de Naciones Unidad para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha vuelto a poner de relieve el delicado equilibrio entre la salud humana y la del planeta. Por un lado, apunta a la carne, los huevos y la leche como productos de origen animal cuyos nutrientes esenciales son difícilmente reemplazables por los alimentos vegetales. Por otro, recuerda los retos que debe afrontar el sector ganadero en materia de sostenibilidad.

De esta forma, el estudio «Contribución de los alimentos de origen animal terrestre a una dieta sana para mejorar la nutrición y la salud» destaca la aportación de proteínas de alta calidad, ácidos grasos esenciales, hierro, calcio, zinc, selenio, vitamina A, vitamina B12, colina y compuestos bioactivos como carnitina, creatina y taurina, todos ellos con una función importante para la salud y el desarrollo, y especialmente importantes, por lo tanto, durante etapas como el embarazo y la lactancia, la infancia, la adolescencia y la tercera edad.

Como parte de una dieta balanceada, añade el informe, los alimentos de origen animal pueden ayudar a alcanzar las metas de nutrición marcadas en los ODS. Metas en las que, a nivel medioambiental, los responsables de la FAO recuerdan que el sector ganadero tiene otras dimensiones que vigilar, como la de forestación, los cambios ene luso del atierra, las emisiones, el uso insostenible del agua, la contaminación o la competencia entre alimentos y piensos. A estas cuestiones se añaden el sobrepastoreo, el bienestar animal deficiente o las relacionadas con la sanidad animal, incluida la resistencia a los antimicrobianos.

Mención aparte merece el capítulo de los riesgos que conlleva el consumo de carne roja procesada, incluso en cantidades bajas, por su potencial para aumentar el riesgo de mortalidad y enfermedades cardiovasculares o el cáncer colorrectal.