Movilidad

El 61% de los automovilistas, en contra de las zonas de bajas emisiones

Según una encuesta del RACE, la mayoría opina que se imponen por razones políticas, no medioambientales

Cartel que delimita la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), a 31 de diciembre de 2022, en Barcelona
Cartel que delimita la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), a 31 de diciembre de 2022, en BarcelonaDavid ZorrakinoEuropa Press

La implantación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que restringen la circulación en el centro de las ciudades de más de 50.000 habitantes obedece a motivos políticos y no medioambientales y mayoritariamente son contrarios a la implantación de estas áreas de circulación restringida que afectan en muchos casos a sus desplazamientos al trabajo, según una encuesta realizada por el Observatorio RACE de Conductores.

El Real Automóvil Club de España ha preguntado durante este mes a más de 1.500 automovilistas sobre su punto de vista acerca de cómo ven y cómo pueden afectarles las Zonas de Bajas Emisiones que se están imponiendo en muchas ciudades. El resultado es que más de la mitad, en concreto un 54%, atribuye la creación de estas zonas a “agenda e intereses políticos”, mientras que sólo el 35% de los encuestados piensan que la motivación real obedece a la mejora del medio ambiente. El resto, un 11%, o bien no tienen clara su respuesta o lo atribuyen a otras razones.

Al margen de la motivación, el rechazo a las ZBE en mayoritario: un 61% de los encuestados se muestra en contra de estas zonas, mientras que sólo un 31% está a favor, por un 9% que no lo tienen claro. La creación de las Zonas de Bajas Emisiones ha afectado o va a afectar a los desplazamientos del 52% de los habitantes (o trabajadores) de ciudades de más de 50.000 empadronados. A un 32% no les afectará en su día a día ya que su forma habitual de desplazamiento estará permitida, mientras que un 11% afirma que quedan fuera de sus viajes diarios.

En este sentido, entre todos aquellos conductores que se van a ver afectados por las ZBE, el 71% se desplaza o se desplazaba en coche antes de su puesta en marcha, un porcentaje que, una vez estén todas establecidas, se reducirá hasta el 46%. ¿Qué harán el resto? El trasvase se inclina hacia el transporte público, que pasará del 13% al 27%, seguido por aquellos que se desplazarán a pie (del 8 al 11%) o en moto, que asciende del 6 al 7%. Opciones como la bicicleta (que se mantendrá como medio de transporte sólo para el 1% de los encuestados) o el patinete (que sube de menos del 1% al 1%), siguen siendo residuales.

Los conductores encuestados por el RACE afirman encontrarse con una alarmante falta de alternativas. Un 31% afirma que evitará las Zonas de Bajas Emisiones en medida de sus posibilidades, y un 19% no sabe cómo adaptarse, ya que no les resulta válida ninguna de las alternativas actuales. Un dato muy preocupante para los fabricantes de vehículos es que sólo el 14% ha cambiado o plantea cambiar su coche por uno que sí cumpla con las restricciones de movilidad de estas áreas. Respecto al tipo de actividad, un 42% se verán afectados en sus desplazamientos particulares (colegios, hospitales…), un 40% en su ocio, un 28% en sus desplazamientos de ida y vuelta del trabajo, y un 15% durante su jornada laboral.

Los encuestados muestran también serias dudas de cara a sus desplazamientos vacacionales. Un 27% lo disfrutan en ciudades de más de 50.000 habitantes, pero un 32% desconocen el dato. Del total de encuestados, un 41% viajarán en su situación vigente, y usarán en el destino el tipo de movilidad que puedan, un 33% afirman que su vehículo cumple con las normativas, mientras que un 20% cambiará de destino por culpa de las ZBE. Por su parte, sólo un 5% afirman que usarán un vehículo diferente.