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Recorrido por los acantilados de Cabo de Palos (Cartagena), el paraíso de los buceadores

El faro, el puerto, o sus 18 playas, son solo algunos de los atractivos que encierra este espectacular rincón de la Región de Murcia

El verano que te prometiste
El verano que te prometisteABEL F. ROS | Qapta.esLa Razón

Cabo de Palos, en Cartagena, es una península de unos 600 metros de longitud de origen volcánico, orientada de este a oeste, que forma la parte más occidental del sistema Bético que aquí se hunde en el mar, dando lugar a los bajos marinos y las islas próximas. La costa baja y arenosa, en su tramo de La Manga, se vuelve abrupta y rocosa al doblar el cabo, abriéndose en pequeñas calas, oquedades y recovecos creados por la erosión, albergando ricos hábitats de flora y fauna.

Conectando el puerto de Cabo de Palos con su faro, encontramos un paseo muy especial que recorre los acantilados del pueblo y cada una de sus maravillosas calas. Pequeñas escalerillas facilitan el acceso a cada una de ellas, auténticos paraísos del buceo y el snorkel. No se recomienda salirse del recorrido señalizado. Los acantilados y las calas de Cabo de Palos son realmente alucinantes.

El Faro de Cabo de Palos

Emblema de Cabo de Palos, el gran faro se iluminó por vez primera en 1865. Su haz de luz es capaz de llegar a más de 40 km, sirve de guía para los más de 50.000 barcos al año que navegan por sus costas. Su panorámica de 360 grados nos permite divisar La Manga en su longitud, así como las reservas marinas de Islas Hormigas e Isla Grossa. Sin lugar a dudas, el faro se ha convertido en uno de los sitios más bonitos de la costa desde el que contemplar un atardecer sin igual.

La Playa de Levante

Esta playa, que conecta con La Manga, es la pequeña bahía del pueblo. Su orientación hace que sea un remanso de agua, lugar ideal donde resguardarse de las grandes olas de los vientos de levante. Su color turquesa característico y sus aguas cristalinas hacen que el baño sea algo totalmente irresistible.

La isla del Pato

Se encuentra en la cala colindante a la playa de Levante. Resguardada de las olas y protegida por la isla, la cala se convierte en una piscina natural que no te puedes perder. El islote del pato de Cabo de Palos es uno de los lugares más frecuentados por aquellos atrevidos a los que no parecen asustar las alturas.