Sin Perdón

Un gobierno que opta por el mal gobierno

«La izquierda ha impuesto un artificial rodillo parlamentario en la Diputación Permanente»

Lo sucedido ayer en la Diputación Permanente del Congreso es asombroso. Al margen de cualquier adscripción partidista, hay una serie de asuntos sobre los que debería informar el Gobierno. Al Poder Legislativo le corresponde constitucionalmente la función de controlar al Ejecutivo. Es, además, algo razonable. Es lo que sucede en los países de nuestro entorno, pero España es, una vez más, una anomalía por culpa del Gobierno de coalición socialista comunista. Lo lógico es que las ministras y los ministros hubieran pedido comparecer a petición propia y que se hubieran adelantado a la oposición. No solo no ha sido así, sino que han impuesto un artificial rodillo parlamentario en la Diputación Permanente que no se corresponde con lo que hubiera sucedido en una sesión plenaria, ya que PP, Vox y Junts hubieran tenido una mayoría suficiente para derrotar al bloque de la izquierda. Sánchez y su fiel Armengol no se deberían sentir orgullosos ante lo sucedido, aunque haya obtenido el aplauso de la izquierda mediática. El PP había solicitado diez comparecencias para tratar, entre otros asuntos, sobre la política migratoria, la huida de Puigdemont, el concierto y cupo para Cataluña y el caos del sistema ferroviario. Me pregunto qué dirían los medios de comunicación controlados o afectos al sanchismo si las peticiones de comparecencia afectaran a ministros del PP. Es evidente que la campaña sería, una vez más, inmisericorde. Por mucho menos pedían dimisiones. En cambio, como gobierna Sánchez todo lo que hace, incluido este despropósito, les parece muy acertado. Los responsables ministeriales tendrían que acudir al Congreso con absoluta normalidad. ¿La crisis migratoria merece ser tratada en profundidad o es suficiente con la propaganda monclovita? ¿Es lógico que Montero no informe sobre un asunto tan grave como es la cesión de la soberanía fiscal a Cataluña?

Hay un aspecto muy inquietante en lo sucedido este martes en la Diputación Permanente para Sánchez que es la posición de Junts, ya que garantiza que la legislatura, como decía el portavoz de Podemos, esté acabada. Ni presupuestos ni actividad legislativa es lo que parece augurar. Es cierto que con Sánchez puede suceder cualquier cosa, pero a priori parece que este escenario es muy sombrío. Me entristece constatar que en lugar de perfeccionar nuestra democracia, la izquierda opta por deteriorarla con sus actos.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE).