El trípode

Sánchez en Niza liderando la biodiversidad interoceánica

Esperemos que una próxima apelación a manifestarse contra la «mafia» se pueda materializar desde la unidad de sus opositores

Como estaba previsto, la manifestación convocada ayer en Madrid para exigir que Sánchez convoque elecciones anticipadas ha dado lugar a una flagrante disparidad entre la cifra de asistentes estimada por parte del PP convocante y la Delegación del gobierno sanchista. Pretender que el titular de la Delegación, y acreditado sumiso servidor de Sánchez, dijera la verdad hubiera sido una contradicción existencial. No es especialmente importante que hubieran más de 100.00 asistentes o la mitad, como dice el aludido, pero es un detalle más respecto a lo que se ha convertido la política en España con el actual Frente Popular. El guion de las intervenciones del acto sí que cumplió con las expectativas positivas esperadas, aunque también en cuanto a las omisiones, dada la incapacidad de que las formaciones parlamentarias que integran la oposición, PP y Vox , articulen una colaboración en la que prime -por encima de las diferencias políticas entre ellos- la apremiante necesidad de acabar políticamente con el sanchismo en el gobierno. También y según marca el guion, Sánchez se ausentó ayer de España camino de Niza para asistir a la tercera cumbre Interoceánica que es tan importante que EE UU y China están ausentes de la misma. El objetivo prioritario de esta cumbre es conseguir la ratificación del «Tratado Global sobre la Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina, Más Allá de la Jurisdicción Nacional», adoptado por la ONU hace dos años. España fue el primer país de la UE en ratificarlo y en Niza se aspira a conseguir que se alcance la cifra necesaria para ello, con Sánchez de gran líder ecológico mundial. Que se dedique a pasearse por el mundo promoviendo la «biodiversidad oceánica» puede resultarle muy interesante a Sánchez pero que deje antes de residir en la Moncloa para ello. La fauna marina es muy posible que se lo agradecerá y los españoles también. Por supuesto, no los que le siguen votando, pese a los clamorosos incumplimientos de compromisos que había asumido de no pactar con ni uno solo de todos los que integran su coalición frente populista. Es una lamentable constatación observar que un tercio de los ciudadanos españoles con derecho a voto de hecho estén sumidos en el «síndrome de la rana», ajenos a la degradación política, ética y moral de España que provoca Sánchez. O que sigan instalados en el frente populismo de 1936 que precipitó a las «dos Españas» y a la posterior guerra civil. Esperemos que una próxima apelación a manifestarse contra la «mafia» se pueda materializar desde la unidad de sus opositores.