Diada

Más de 2.000 personas se podrían haber infectado durante la Diada

Los expertos alertan del riesgo de un brote masivo de contagio a causa de las concentraciones en Cataluña

“No son tiempos de Diadas, concentraciones o manifestaciones”. Así de contundente se muestra Joan Carles March, profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública, para quien este tipo de acciones en tiempos de coronavirus no tienen lugar.

“Lo que está claro es que por la situación en la que estamos con la pandemia, y en concreto en Cataluña y en Barcelona, no es razonable que se promuevan situaciones de este tipo. No se deben fomentar reuniones multitudinarias. Este no es el momento, no de las reivindicaciones, si no de juntarse”, asegura. Más aún cuando las cifras estimadas de participación en las mas de 100 concentraciones en distintas localidades de Cataluña convocadas por Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Omnium Cultural para este viernes rondaría las 50.000 personas. “No digo que no se puedan hacer reivindicaciones, pero seguramente se puedan llevar a cabo sin tener que reunir a tantas personas porque las multitudes favorecen el contagio -continúa el experto-. Dudo que se si se juntan 50.000 personas se logre mantener la distancia adecuada, lo que supone un problema”.

De la misma opinión es el médico Antonio Burgueño quien, para dar una idea del riesgo que ello supone hace el cálculo: “La proporción en estos momentos de personas contagiadas por el virus en Cataluña es de 200 por cada 100.000 habitantes. Suponiendo una participación de 50.000 personas en las movilizaciones, hay que contar con unos 100 contagiadores asintomáticos potenciales”, asegura. Es decir, un centenar de personas “sembrando” la enfermedad. “Y cada uno de ellos durante unas dos horas que dure la manifestación, puede contagiar a 20 personas de su alrededor, por lo que si hacemos la cuenta esto significa que pueden salir de ella unos 2.000 casos. Esto es lo que dicen las estadísticas estrictas, porque 100 personas circulando no por el mismo sitio durante dos horas es posible que se relacionen con más de 20 personas”.

Pirámide de contagios

Lo malo es que la cosa no se queda ahí pues “esto es una pirámide de contagios, porque estas personas se irán a sus casas y se juntarán con otras personas, y al día siguiente empezarán a ser contagiadores, por lo que en diez días podrían ser el doble de casos y convertirse en un brote muy serio”.

Valga como experiencia lo sucedido con la manifestación por el Día de la Mujer, sin embrago March advierte de una significativa diferencia: "Existe una diferencia con respecto al 8 de marzo, y es que entonces no se sabía sobre el coronavirus lo que se sabe ahora. La clave no está en comparar, sino en valorar que en el momento que vivimos no tiene sentido hacer concentraciones de 50.000 personas porque con ello sólo se facilita el juntar a gente lo que no favorece a nadie”, señala March.

De igual manera piensa Burgueño quien entiende que actos así son “una temeridad por parte de quien convoca la manifestación y de quien la permite conociendo lo que ya conocemos de la epidemia. No puede ser que un político admita una manifestación después del 8M. Es una barbaridad que debería tener consecuencias jurídicas”.