Estudio

Cada euro invertido en vacunación infantil ahorra 22 euros en gastos sanitarios en España

Por cada empleo directo en el sector farmacéutico se generan entre 3 y 5 entre indirectos e inducidos, según el informe Weber 2024, presentado por Farmaindustria

Las vacunas que se disponen en la actualidad son muy seguras y eficaces
Las vacunas son un ejemplo paradigmático de ahorroDREAMSTIMELA RAZÓN

El medicamento resulta esencial para la salud y la calidad de vida de las personas. Y no solo. También contribuye al ahorro de los costes generales e individuales que suponen las enfermedades, permite una mayor productividad laboral y mejora la economía.

Así, en España "por cada euro dedicado a vacunación infantil ocasiona 22 euros de ahorro de gastos del sistema sanitario", afirma Jesús Ponce, presidente de Farmaindustria, durante la presentación del informe "El valor del medicamento desde una perspectiva social de 2024", realizado por la Fundación Weber, especialista en Economía de la Salud, con el apoyo de Farmaindustria.

Y en el caso de las vacunas contra la covid, "por cada euro destinado a estas vacunas, el retorno ha sido de 1,4 para el sistema y 3,4 euros para la sociedad", afirma Néboa Zozaya, directora de Health Affairs and Policy Research de la Fundación Weber.

Esto demuestra que las vacunas son una de las intervenciones de salud pública más coste-efectivas, con unos beneficios que normalmente superan con creces sus costes de desarrollo e implementación, especialmente en el largo plazo.

Los medicamentos, como recuerda Ponce, "no son un gasto, son una inversión y son una inversión estratégica para nuestra sociedad, para nuestro país y para Europa". Prueba de ello es que la esperanza de vida ha aumentado a lo largo de los años, en gran parte gracias a la innovación farmacéutica hasta situarse en 83,2 años en España.

Así, “entre 2006 y 2016 en España la esperanza vida ha mejorado en 1,7 años de vida, partiendo de que tenemos una esperanza de vida de las más altas y una de las causas es el uso de medicamentos innovadores. En enfermedades cardiovasculares, cáncer o diabetes la oportunidad de valor es mayúscula en aportar valor y eficiencia al sistema sanitario", afirma Ponce.

Así, en Oncología se han aprobado "115 medicamentos innovadores en los últimos 10 años", pues bien, "según diversos estudios entre 1996 y 2006 en España el 96% de las razones de mejora de la esperanza de vida en los pacientes oncológicos ha sido debido a la innovación farmacéutica", pone en valor el presidente de Farmaindustria.

En cuanto al valor económico, "este sector genera más de 51.000 empleos (51.310 en 2021) en España, lo que supuso un incremento del 13% respecto a 2018", afirma Néboa Zozaya, directora de Health Affairs and Policy Research de la Fundación Weber.

El empleo de la industria farmacéutica ha experimentado un aumento del 3,1% anual promedio desde 2012, en comparación con el crecimiento del 2% del sector industrial.

Se trata de un sector de elevada productividad. En España, es el segundo sector industrial de mayor productividad por empleado (116.000 euros), un 62% más que el promedio de la industria. A nivel mundial, el valor de esta industrial equivale a la economía de un país como Holanda, tal y como se recoge en el informe.

Además, como destaca Zozaya, "es el segundo sector industrial con más inversión en I+D: 1.435 millones de euros en I+D+i en 2022. En 2022 el sector pasó a ser netamente exportador".

En cuanto a los puestos de trabajo que crea el sector farmacéutico, Zozaya hace hincapié en que "por cada empleo directo se generan entre 3 y 5 entre indirectos e inducidos. Así, teniendo en cuenta todo esto, podemos afirmar que por cada euro dedicado al sector farmacéutico se generan entre uno y dos euros adicionales".

Tras la presentación del informe, se debatió sobre si se tiene o no en cuenta realmente el valor añadido del medicamento cuando se aprueba su financiación con el fin de incentivar la innovación. En este sentido, Pedro Luis Sánchez, director del Departamento de Estudios de Farmaindustria, se mostró crítico, ya que le "llama la atención que se diga que se dan incentivos cuando lo que se hace es desincentivar" y recordó que si hay algunas patologías en las que el valor social es sumamente crítico son las enfermedades raras.

"Evaluar bien ver, analizando los costes y los beneficios, no es una cosa imposible. La guía de análisis de costes y beneficios de la Comisión Europea fija toda una serie de criterios como el descenso de producción evitado por reducción número de días hospitalizado. Eso lo recomienda la Comisión Europea para ver viabilidad de si se hace o no un hospital. Entonces, ¿por qué no para ver si se financia un medicamento?", se pregunta.

"No se trata solo de mejorar la metodología para que se incluya solo el valor social, sino que se deberían incluir todos los impactos económicos y sociales y no únicamente en el corto plazo", incide Juan Yermo, director general de Farmaindustria.

"Los retornos de la innovación farmacéutica, como se demostró en el covid, son abrumadores, tal y como refleja este informe", afirma Yermo.

"El impacto económico viene por el medicamento, por el paciente, que puede volver a trabajar, por su salud mental, y por el impacto económico que tiene la industria en sí. Cada euro invertido en medicamento crea un doble beneficio socioeconómico en la sociedad en el corto, medio y largo plazo. Estamos en un momento de cambio normativo y legislativo, una oportunidad para mejorar la normativa. Y es importante hacer las cosas bien porque nos jugamos mucho", concluye Yermo, que pide ver en "el medicamento una herramienta de progreso y de cohesión social".

Y pone un ejemplo: "En España, se calcula que un incremento del 10% en las tasas de adherencia para cuatro enfermedades (cardiovascular, EPOC, diabetes tipo 2 y depresión mayor) podría generar ahorros de más de 500 millones de euros en costes sanitarios directos", además de prevenir 8.700 muertes por enfermedad cardiovascular, más de 10.000 muertes y 190.000 exacerbaciones por EPOC, 52.000 eventos adversos relacionados con la diabetes tipo 2 y 25.000 recaídas por depresión mayor, como recoge el informe.

Por último, Antonio Blázquez, jefe del departamento de medicamentos de uso humano de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), cerró el acto explicando que "en septiembre me escribió un chico de 16 años con una enfermedad rara que no solicitaba un medicamento porque por desgracia su enfermedad no tiene cura, se quejaba del dolor y de que no podía ir a clase y hacer lo mismo que el resto de los adolescentes. Ese valor social no se recoge en ningún informe y desde luego lo tiene".

"Implementar una nueva normativa no es fácil. Pero creo que vamos por el buen camino. Lo que debemos a los ciudadanos por parte de la Administración es ganar en transparencia", reconoce.