Salud

Casi dejan morir a los gemelos más prematuros del mundo: nacieron con 22 semanas y ahora cumplen 1 año

Los médicos no confiaban en su viabilidad y apostaron por los cuidados paliativos, pero la entereza de sus padres y los cuidados profesionales que recibieron les salvaron la vida

los gemelos más prematuros del mundo nacieron en Canadá
El récord de los gemelos más prematuros del mundo: nacieron cuatro meses antes de tiempo y ahora cumplen 1 añoCortesía Shakina Rajendram

Las palabras del médico fueron definitivas: los bebés no eran "viables". Pero Rajendram, de 35 años, y Nadarajah, de 37, residentes en Toronto (Canadá) no se rindieron. A pesar de lo desalentadoras que fueron las noticias del facultativo, se negaron a creer que sus gemelos no saldrían adelante. Así que buscaron en Internet. La información que encontraron les alarmó y les animó a la vez: había esperanza.

Y vaya que si la había. Los gemelos más prematuros del mundo han cumplido 1 año de vida. Adiah y Adrial Luja han celebrado su primer cumpleaños y han recibido un regalo muy especial: el Récord Guinness que les reconoce como los bebés idénticos más prematuros de la historia. Así, le han arrebatado el título a Keely y Kambry Ewoldt, que nacieron a los 125 días.

Los gemelos nacieron en Canadá el 4 de marzo de 2022, 126 días antes de la fecha prevista para el parto y tras tan solo 22 semanas de gestación. Adiah, la niña, pesó 330 gramos y nació 23 minutos antes que su hermano gemelo Adrial, con un peso de 420 gramos. Además de los más prematuros, son también los gemelos más ligeros que han nacido en el mundo. Ya habían concebido una vez, pero el embarazo fue ectópico -fuera del útero- y terminó a los pocos meses.

"Casi los dejaron morir"

La familia fue trasladada al Hospital Mount Sinai de Toronto, especializados en reanimación de bebés de 22 semanas. "Cuando me puse de parto, a los bebés se les negaron todas las medidas de soporte vital en el hospital en el que me ingresaron y casi los dejaron morir", aseguró su madre al equipo de Guinness World Record. Rajendram se puso de parto con tan solo 21 semanas y cinco días de gestación. Los médicos le dijeron que no podrían salvar a sus hijos y que los gemelos no tenían probabilidades de supervivencia. Lo único que podía hacer el hospital por los pequeños era el darles el "cuidado del confort": colocar a los gemelos en el regazo de su madre hasta que sus corazones dejasen de latir.

Finalmente, los bebés nacieron en el momento justo para ser elegibles para recibir atención proactiva, reanimación, nutrición y soporte de órganos vitales, según fuentes del propio hospital. Pero lo cierto es que, de haber nacido 60 minutos antes, el equipo médico no habría podido intervenir.

"No entendimos muy bien por qué había un límite tan estricto a las 22 semanas, pero sabemos que el hospital tenía sus razones. Se encontraban en un terreno desconocido y sé que tuvieron que establecer algunos parámetros sobre lo que podían hacer", explica Rajendram. El Dr. Prakesh Shah, pediatra jefe del Hospital Mount Sinai, dijo que fue "franco" con la pareja sobre los retos que les esperaban a sus gemelos.

Anualmente nacen en el mundo 15 millones de prematuros
Anualmente nacen en el mundo 15 millones de prematuroslarazon

Los bebés pesaban poco más que una lata de refresco y sus órganos eran visibles a través de una piel translúcida. La aguja utilizada para alimentarlos tenía menos de dos milímetros de diámetro, aproximadamente el tamaño de una aguja fina de tejer. "En algún momento, muchos de nosotros pensamos '¿es realmente esto lo que hay que hacer por estos bebés?'. Sufrían mucho dolor y angustia", relata para la CNN.

Las semanas siguientes al nacimiento no fueron sencillas de digerir. "Vimos a los bebés casi morir ante nuestros ojos muchas veces", dijo la madre, a los medios de comunicación. La segunda semana después de nacer, Adrial tuvo una perforación intestinal, una situación grave que le llevó a sufrir una infección en la sangre. Su cuerpo se inflamó y su piel se estaba "desprendiendo" cada vez que se les cambiaba el catéter o se les quitaba la cinta quirúrgica, según el pediatra.

"En los primeros días se nos planteó en varias ocasiones la posibilidad de retirarles los cuidados, eso es un hecho, y en esos momentos nos unimos en oración y vimos un cambio", explica Nadarajah, el padre. Los gemelos estuvieron ingresados seis meses luchando contra todo tipo de complicaciones. Junto a ellos, sus padres no dejaron de pelear y llegaron a pasar hasta 12 horas al día practicando el método "piel con piel". Después de 161 días en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, les dieron el alta. "Finalmente pudimos llevarlos a casa, sin tubos de respiración o alimentación", expresaron sus padres.

Los contratiempos no terminaron ahí. Durante casi medio año de tratamiento en el hospital, hubo complicaciones. El camino de Adrial, el niño, fue un poco más difícil. Fue hospitalizado en tres ocasiones más por diversas infecciones. A día de hoy, los gemelos continúan teniendo que acudir a revisiones y recibir diversos tipos de terapia varias veces al mes. Pero sus padres, por fin, están más tranquilos. Cada vez que vuelven a casa lo celebran como un "nuevo milagro" diario.