Tecnología

Operar con robots, ¿la opción estándar en el futuro?

Menos del 5% de las intervenciones se realiza hoy con estos sistemas, pero se espera un avance imparable

Imagen del sistema robótico Da Vinci que tienen en el Hospital Quirónsalud La Coruña
Imagen del sistema robótico Da Vinci que tienen en el Hospital Quirónsalud La CoruñaQuirónsalud

Más de 37 años han transcurrido desde que se realizaron las primeras cirugías robóticas. «Eran sistemas robóticos algo rudimentarios», recuerda el doctor José Noguera, cirujano general y digestivo del Hospital Quirónsalud La Coruña. Y aun así, ya se vislumbraba su enorme potencial: una técnica menos invasiva, que permite realizar procedimientos con mayor precisión y control en comparación con las intervenciones convencionales, lo que se traduce en una más pronta recuperación del paciente.

Algo que se hizo patente en 1999 cuando el Da Vinci se lanzó al mercado. Aunque hubo que esperar hasta el año 2005 para que se hiciera en España la primera cirugíacon este sistema robótico, según los datos facilitados por el cirujano.

Indicada en todos aquellos procesos donde se pueda realizar un abordaje laparoscópico o de mínima invasión, la cirugía robótica empezó a utilizarse en las intervenciones de «prostatectomía radical, un tipo de cirugía que se suele realizar en casos de cáncer de próstata y que permite la preservación neural, lo que evita problemas como la disfunción eréctil y urinaria», detalla el doctor.

Tras la Urología, «la Cirugía digestiva –prosigue Noguera– ha sido el campo de mayor implantación, sobre todo en el caso del cáncer colorrectal. La Ginecología y la Cirugía torácica han sido también dos especialidades con amplio uso del robot».

Su freno actual es el acceso a la tecnología y su coste. Esto explica por qué el porcentaje de operaciones que se realizan con robots «es todavía muy bajo. Se hacen menos del 5% del global de las intervenciones y en centros que tienen sistemas robóticos ese porcentaje no llega ni al 15% del total de sus operaciones», precisa el doctor Noguera.

Y eso que en la actualidad «existen 137 sistemas Da Vinci instalados, tanto en hospitales públicos como privados», afirma el doctor Salvador Morales, jefe de Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, en Sevilla.

El Da Vinci no es el único robot. Con la llegada de Hugo, se acabó con «el monopolio» de los robots de asistencia quirúrgica, y se ampliaron las posibilidades. Y es que esta plataforma, a diferencia del Da Vinci, cuenta con un sistema modular por el que sus cuatro brazos son independientes, lo que le confiere una mayor versatilidad. Además, su consola es abierta, de manera que el cirujano puede comunicarse con facilidad con sus asistentes.

No obstante, «se trata de un robot modular que tiene todavía que demostrar las potenciales mejoras sobre el sistema Da Vinci. El concepto de modularidad puede traer ventajas en algunas situaciones al tener cada brazo separado con un carro de desplazamiento y acoplamiento propio», precisa el doctor Noguera.

Prácticamente se puede emplear en el mismo tipo de procedimientos, si bien las peculiaridades de montaje y acoplamiento harán más ventajoso el uso de uno u otro en los distintos procesos quirúrgicos.

A ellos hay que sumar los diferentes robots quirúrgicos que están saliendo ahora al mercado, «con un solo carro, modulares y robots para trabajar por puerto único», destaca el cirujano.

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De modo que en un futuro próximo, no tan lejano, es más que previsible «un crecimiento exponencial» del uso de sistemas robóticos, prevé el doctor Morales.

«Es raro –continúa– que en nuestros hospitales haya más de un robot, de hecho suele estar compartido además entre varias especialidades, pero existen centros en Estados Unidos donde hay bastantes robots, siendo las cifras de procedimientos cercanos al 50% en esos centros».

Ahora bien, «existen proyectos para ‘‘robotizar’’ en el futuro la mayoría de los hospitales de nuestro país. Llevará tiempo, pero su expansión es imparable», sostiene el doctor Morales.

Lleva dos años utilizando el Da Vinci después de realizar un entrenamiento de unos seis meses en simuladores virtuales y a nivel experimental, y tiene claro que la robótica es y será esencial a corto medio plazo: «La robótica en el desarrollo de la prostatectomía radical en Urología es impresionante, siendo crucial su disponibilidad para muchos urólogos, ya que no han hecho esta cirugía por vía laparoscópica. Lo mismo empieza a pasar en algunos procedimientos de cirugía de pared abdominal para el tratamiento de las hernias ventrales o para la cirugía del páncreas, donde algunos cirujanos han pasado directamente de cirugía abierta a robótica, sin pasar por realizarlas por laparoscopia», concluye el doctor Salvador Morales.