Confinamiento severo
40 días en una cueva para averiguar cómo funciona el cerebro humano
Eso es lo que se ha propuesto el explorador Christian Clot, que anoche se encerró en Lombrives, en Ariège, cerca de la frontera con España, con otras 13 personas. Sin luz natural, teléfono, ni reloj.
El confinamiento derivado de la pandemia ha sido el mayor experimento psicológico de la Historia. Se estima que, hace un año en estos días, al menos 2.600 millones de personas (1/3 de la población mundial) fueron puestas bajo algún tipo de cuarentena. En España nos esperaban cerca de 60 días sin salir de casa, nada más que para ir al supermercado, a la farmacia o a un centro médico. No teníamos ningún modelo, ya que, hasta entonces, los confinamientos provocados por otros virus como el Ébola u otros coronavirus (SARS, MERS) se habían realizado a una escala local, mucho menor, y solo en algunos países.
Hoy, un año después, sabemos que los periodos de aislamiento han traído consecuencias muy negativas, especialmente para la salud mental de las personas. Los trastornos de estrés y ansiedad han aumentado entre un 30 y un 45%, el insomnio es el nuevo mal endémico y la depresión acecha a una de cada diez personas. Pero, ¿qué es lo que le pasa a nuestro cerebro cuando nos vemos obligados a aislarnos del mundo? Ésta y otras preguntas son las que se ha propuesto resolver Christian Clot, explorador franco-suizo y director del Instituto de Adaptación Humana que él mismo fundó para llevar al límite al hombre, en previsión de lo que viene: desde el nuevo escenario por el cambio climático a la colonización de otros mundos.
Su última aventura se llama Deep Time y comenzó anoche. Clot se «encerrará» 40 días con ocho hombres y seis mujeres de entre 29 y 50 años que intentarán llevar a cabo una experiencia de confinamiento extremo en la cueva más grande de Europa. Una especie de Gran Hermano pero sin contacto con el mundo exterior. «Empujaremos una situación al extremo para acelerarla, observarla y tratar de entender una serie de mecanismos fisiológicos y cognitivos», explica el explorador al diario francés «Le Monde». «Estaremos en una anomia temporal; es decir, sin reloj y sin ver la luz del Sol. Un poco como lo que vivimos todos en 2020. La gente se encontró inmersa en una nueva situación y tuvo que adaptarse. Pero, ¿qué pasó con su cerebro? ¿Cómo encontramos la sincronicidad humana? Eso es lo que intentaremos entender gracias a esta misión», añade.
Mientras, en la superficie, una treintena de científicos supervisarán cada movimiento e interacción de estos voluntarios. Estudiarán su cuerpo (ritmo biológico, sueño…), analizarán su cerebro (capacidad de tomar decisiones, de orientarse), y medirán las emociones que despiertan las interacciones entre ellos. En concreto, la experiencia tratará de arrojar luz sobre tres interrogantes: cómo se enfrenta y gestiona el cerebro el concepto tiempo sin tener ninguna referencia; cómo aborda la desorientación, y cómo funciona un grupo humano en conjunto en una situación completamente nueva.
La aventura de Clot no es la primera que se realiza para tratar de averiguar cómo responde el ser humano al aislamiento. En 1962, el espeleólogo francés Michel Siffre se adentró en una cueva helada de Scarrasson, en los Alpes, durante 61 días (aunque él creyó contar 34 días). El resultado de su experiencia fue el mayor descubrimiento sobre nuestros ritmos biológicos: que el ritmo circadiano (el reloj interno que marca el ciclo de sueño/vigilia) cambia al no estar en contacto con el exterior y la luz solar. A Siffre le siguieron otros muchos, aunque el récord lo ostenta el serbio Milutin Veljkovich, que pasó 463 días en la cueva de Samar (antigua Yugoslavia).
Pero Deep Time tiene un valor añadido, y es que nunca se ha realizado una experiencia parecida con estudios del cerebro y la genética. «Esta es una primicia mundial en su metodología y principio», señalan desde su web. Aunque tendremos que esperar unos meses hasta que se publiquen los resultados, lo vivido en 2020 nos permite tener pistas sobre cuáles serán los principales efectos de este confinamiento: fatiga, desorientación, pérdida de memoria a corto plazo, más pesadillas durante el sueño, diferentes alucinaciones y, en mujeres, el ciclo menstrual hasta puede llegar a cortarse.
✕
Accede a tu cuenta para comentar