Religión

Religión

Enrique Benavent, nuevo arzobispo de Valencia tras la marcha de Antonio Cañizares

El hasta ahora obispo de Tortosa sucede al cardenal Cañizares al frente de la diócesis. “Asumo una responsabilidad que nunca hubiera imaginado”, ha expresado.

El cardenal Antonio Cañizares Llovera, a punto de cumplir 77 años, ha dejado este lunes de ser arzobispo de Valencia tras ocho años en este puesto. Su sucesor será el también valenciano Enrique Benavent, hasta ahora obispo de Tortosa (Tarragona). Ha sido el propio arzobispo de Valencia el que ha anunciado en una sala a del Palacio Arzobispal el nuevo nombramiento. “Todo seguirá igual”, ha asegurado Cañizares, quien ha señalado que la toma de posesión se producirá el 10 de diciembre.

Cañizares ha declarado que tras ocho “intensos años” de trabajo para la Iglesia “ha llegado a la meta” y renuncia al cargo “como era previsible, sin dilaciones, rémoras ni excusas”. El prelado seguirá como arzobispo emérito de la Diócesis de Valencia, y como administrador apostólico de la Diócesis hasta la llegada de su sustituto. Cañizares ha explicado que cuando cumplió 75 años presentó su renuncia voluntaria a esta sede, a la que ha servido “con gozo y total entrega hasta hoy mismo” y ha trabajado por la Iglesia “a veces hasta la extenuación”.

Durante el acto también se ha leído una carta enviada por el nuevo arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, en la que ha asegurado que con su nombramiento por el Papa Francisco asume una “responsabilidad que nunca hubiera imaginado” al volver a una Diócesis donde sirvió veintidós años como sacerdote y cerca de ocho años y medio como obispo auxiliar. Tras manifestar su gratitud al Papa por su “gesto de confianza” hacia su persona, ha explicado que ha aceptado “con gozo este encargo” y que pide “perdón” por sus “limitaciones”, de las que dice ser “consciente”.

En la misiva, Benavent ha indicado su deseo de hacer de la Iglesia una “auténtica familia” y ha señalado que si la fe y el amor a la Iglesia son “auténticos”, las “diferencias que puede haber” entre sus miembros “no se convertirán en divisiones”. Además, ha subrayado la “dedicación admirable” de Antonio Cañizares durante los últimos ocho años, así como la “sencillez de su persona y su vida” y su entrega total.

El anuncio se produce después de que este domingo, con motivo del 9 d’Octubre, Día de la Comunitat Valenciana, Cañizares se despidiera en un gran acto. Lo hizo durante su homilía del Te Deum en la que agradeció su mandato eclesiástico. “Doy gracias a Dios por concederme este lugar hace ocho años en mi ministerio episcopal y también hoy, casi al final de mi servicio, quiero dar gracias por este don que Dios me ha concedido”, señaló el prelado. “Valencia se me confió a mi cuidado y por ella me gasto y desgasto hasta el extremo, hasta la extenuación si así se requiere” añadió.

Cañizares, nacido en Utiel (Valencia) el 15 de octubre de 1945, cursó los estudios eclesiásticos en el Seminario diocesano de Valencia y en la Universidad Pontificia de Salamanca, en la que obtuvo el doctorado en Teología, con especialidad en Catequética. Fue ordenado sacerdote el 21 de junio de 1970. El Papa Juan Pablo II le nombró obispo de Ávila el 6 de marzo de 1992, tres años antes de que entrara a formar parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe. En 1996 pasó a ser arzobispo de Granada y en 2002, titular del Arzobispado de Toledo; un año más tarde, Juan Pablo II le impuso el palio arzobispal en Roma.

Después de que en 1999 fuera elegido presidente de la Comisión de Enseñanza y Catequesis de la Conferencia Episcopal Española, en 2005 accedió a la vicepresidencia de este órgano y un año más tarde fue creado cardenal en el primer consistorio convocado por Benedicto XVI. En 2013 fue uno de los cinco cardenales españoles en el cónclave para la elección del nuevo Papa. Precisamente, el Papa Francisco le nombró el 28 de agosto de 2014 arzobispo de Valencia en sustitución de Carlos Osoro, designado arzobispo de Madrid. El Cardenal Cañizares ha sido fundador y primer presidente de la Asociación Española de Catequetas, miembro del Equipo Europeo de Catequesis y director de la revista Teología y Catequesis. Además, es miembro de la Real Academia de la Historia desde el 24 de febrero de 2008 y en 2010 fue investido “Doctor Honoris Causa” por la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” (UCV) de la que es Gran Canciller desde 2014. Es el único español que ha estado al frente de un Dicasterio Vaticano.

Las quinielas sobre su sucesor se abrieron hace meses y yaseñalaban al hasta ahora obispo de Tortosa, Enrique Benavent Vidal (Quatretonda, 1959) como el elegido por Roma. De 63 años, ha sido obispo titular de la Diócesis de Tortosa desde 2013. En la Conferencia Episcopal Española (CEE) es el presidente de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe desde 2017. Además, es miembro de su Comisión Permanente. Benavent es licenciado en Teología por la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de València y doctor en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Recibió la ordenación sacerdotal en Valencia de manos de Juan Pablo II el 8 de noviembre de 1982, durante su primera Visita Apostólica a España. El 8 de noviembre de 2004, Benedicto XVI le nombró obispo titular de Rotdon y auxiliar de Valencia. Recibió la ordenación episcopal el 8 de enero de 2005. Fue nombrado obispo de Tortosa el 17 de mayo de 2013 y el 13 de julio del mismo año inició su ministerio episcopal en esta sede.