Investigan si la velocidad causó la tragedia del autobús de Pontevedra en Nochebuena

El accidente de autobús ocurrido en Nochebuena en la provincia de Pontevedra, al caer al río Lérez por causas que están bajo investigación, ha dejado siete muertos y dos supervivientes: el conductor y una pasajera.

El operativo de búsqueda se retomó ayer, tras ser cesado de modo provisonal el domingo, después de que el hijo de la mujer herida en este siniestro - María del Rosario González Rocha, la que dio la voz de alarma desde dentro del autobús- avisase de que su madre iba en compañía de otra mujer con la que tenía pensado cenar, y que esta última se encontraba desaparecida. Por este motivo, el dispositivo se reactivó y el cuerpo fue avistado río abajo, en la cola de la presa, un área a la que es extremadamente difícil acceder.

Según informó el CIAE 112-Galicia, ayer se movilizaron efectivos de la Guardia Civil y de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Cerdedo Cotobade. Además, se avisó a los Bomberos de O Deza y al servicio de Emergencias de A Estrada, así como al servicio de Gardacostas. Poco después, la delegación del Gobierno en Pontevedra confirmaba que había sido localizado el cuerpo de esta mujer, de unos 50 años.

Recuperar el autobús “tal cual”

La Delegación del Gobierno en Galicia, que dirige José Miñones, informó ayer de que el Ministerio de Transportes sopesa distintas posibilidades para tratar de recuperar el autobús “tal cual” está para facilitar la labor de investigación. Una investigación en la que se ha abierto la posibilidad de que, además de las condiciones climáticas adversas- con fuerte lluvia, viento, y el río crecido muy por encima de su caudal habitual- influyera en el accidente un exceso de velocidad.

Para saberlo, habrá que esperar hasta el miércoles o el jueves, cuando se espera que baje el caudal del rio, algo que es “crucial para poder trabajar en las condiciones de seguridad que un dispositivo de esas magnitudes requiere”. “Hay que comprobar que la grúa (de gran tonelaje) pueda con esa carga y que también el viaducto (el puente de Pedre) soporte el peso del autobús y la corriente de agua”, explicó Miñones. “Las condiciones climáticas en la zona son uno de los factores, pero habrá que ver exactamente todas las causas”, señaló, antes de afirmar que recuperar el autobús “dará muchísima información”.

Así las cosas, se espera que la recuperación del autobús siniestrado pueda arrojar luz sobre las causas del siniestro. Se trata de un vehículo de unos 6 años de antigüedad, con capacidad para 55 pasajeros y que realizaba para la compañía Monbus la línea Lugo-Vigo. Hasta el momento, según ha confirmado Miñones; todavía no ha sido analizada la información del tacógrafo del autobús, cuyo conductor, uno de los dos supervivientes, ha dado negativo en las pruebas de alcohol y drogas.

Las siete víctimas

La víctima más joven del siniestro es Eneas Valverde,de 21 años y un púgil brillante al que le auguraban un gran futuro. Estudiante en Lugo, viajaba para cenar con los suyos en Nigrán (Pontevedra). Mercedes Castro Blanco, de Carmoega, en Agolada (Pontevedra), es otra de las fallecidas. Había dejado su turismo en Lalín para ir en el autobús y cenar con su hija y sus dos nietos.

Guadalupe Díaz, una profesora de 44 años, madre de dos hijos y que impartía clases este curso en el instituto número uno de O Carballiño (Ourense), es otra de las fallecidas.

Mañana, a las doce, en la plaza mayor de ese municipio se guardaba un minuto de silencio en su memoria.

Otros dos de los fallecidos, madre e hijo, son Cruz Castro Eiras -jubilada tras años como empleada de una pastelería- y Jaime Val Castro, que residían en el municipio pontevedrés de Lalín. y eran naturales del ayuntamiento de Agolada, también en Pontevedra. De Angolada también era María Mercedes Castro Blanco, de 58 años, ganadera de profesión y exesposa de un concejal del PP en esta localidad.

También ha fallecido Edith Luz, natural de Perú y residente en Soutomaior (Pontevedra) que cogió el autobús en la parada anterior al lugar del accidente, próximo a la casa de Cerdedo-Cotobade en la que trabajaba cuidando de una persona mayor.

El accidente tuvo lugar sobre las 21:35 horas del sábado 24, cuando un autobús de la empresa Monbus, de la línea regular entre Lugo y Vigo, cayó al río a la altura del kilómetro 67,5 de la N-541, en la villa de Pedre, tras salirse de la vía en un tramo recto. Solo dos personas, el conductor de este autobús, que fue dado de alta ayer por la mañana, y una de sus pasajeras, que hasta el momento permanece en coma, fueron encontrados con vida.

A lo largo de este 26 de diciembre se han sucedido los minutos de silencio y los pésames. También empiezan a oficiarse los primeros entierros, como el de Mercedes Castro.

El Rey ha enviado hoy sus condolencias a todo el pueblo gallego por el accidente. Felipe VI ha mandado este mensaje a todos los gallegos a través de una llamada telefónica realizada al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que esta tarde contó a la prensa que el monarca le había llamado por la mañana para “interesarse” por la tragedia en la carretera.

“Me pidió que transmitiera a todos los gallegos su pesar por el accidente”, así como su solidaridad con la familia y los allegados de las víctimas”, ha dicho Rueda en declaraciones a la prensa con motivo de la reunión del comité de dirección del PP gallego.