El investigador de Renfe avala la señalización en el recorrido del Alvia siniestrado

El que era jefe de área de investigaciones técnicas de Renfe cuando se produjo el accidente del tren Alvia en Angrois, Manuel Conde, ha avalado la señalización en la línea entre Orense y Santiago, aunque detectó hasta tres discrepancias en los puntos kilométricos en que se ubica la cartelería con respecto a lo que fija el cuadro de velocidades máximas y el libro horario del maquinista, según ha informado Ep.

En el juicio por el siniestro ferroviario, que se ha retomado hoy tras el parón navideño, Manuel Conde ha ratificado su informe, según el cual la única causa del accidente fue el exceso de velocidad.

El perito criticó la duración de la llamada telefónica que el maquinista mantuvo aquel día con el interventor, y ha llegado a considerar que si hubiera durado 30 segundos menos, el descarrilamiento no se habría producido.

Por su parte, el letrado que defiende al maquinista ha interrogado a Conde por una cuestión que sí recoge en su informe, la relativa al efecto que tuvo la presencia de un muro de hormigón en la curva de A Grandeira. «Agrava las consecuencias», ha reconocido este perito, quien ha declarado que la tajea funcionó «a veces» como «una cuchilla».

Sobre el aviso que trasladó un jefe de maquinistas acerca de la peligrosidad de la curva, ya que había que empezar a frenar antes de la señal de limitación a 80 para poder adecuar la velocidad a tiempo, ha indicado que se entrevistó con él en enero de 2014, pero «antes del accidente, nada». «Es más, tenemos recogidas y así hemos aportado, todas las comisiones técnicas de seguridad en la circulación donde deben ser comunicadas estas anomalías», ha agregado. Testigos afirmaron durante el juicio que ese riesgo era conocido.

El juicio por el accidente del Alvia de julio de 2013 se ha reanudado con un aviso de la jueza María Elena Fernández Currás de que la defensa del maquinista acusado aportó «un escrito». La magistrada ha manifestado que «la primera mala fe procesal es de la parte» del letrado en cuestión, por la «aportación sorpresiva de este tipo de documentación» en la víspera, el día 9.