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Entrevista

Ana María Cuervo: "Pronto envejecer ya no será un sinónimo de deterioro"

La investigadora y biologa celular catalana recibe hoy el premio "Leción conmemorativa Jímenez Diaz 2025", que entrega la Fundación Conchita Rábago

Entrevista con la bióloga Ana María Cuervo. © Alberto R. Roldán / Diario La Razón.
Ana María Cuervo en la sede de la Fundación Conchita Rábago, en Madrid Alberto R. RoldánPHOTOGRAPHERS

La población mundial envejece, y el crecimiento podría alcanzar su punto álgido a finales de siglo. España se encuentra entre los países más longevos del mundo y en 2040 se espera que la esperanza de vida alcance los 86 años, superando a Japón. En este contexto, las investigaciones y el trabajo de personas como Ana María Cuervo, codirectora del Instituto Albert Einstein de Estudios sobre el Envejecimiento de Nueva York-por elegir solo uno de sus numerosos títulos- son esenciales. Esta bióloga celular de Barcelona, asentada en Estados Unidos desde hace más de 25 años, es una referencia mundial de la biología del envejecimiento y la neurodegeneración.Su investigación, pionera a nivel global, se ha centrado en comprender los mecanismos de limpieza y reciclado celular, en especial la autofagia. Hoy recibe en Madrid el premio "Lección Conmemorativa Jiménez Diaz 2025", que la Fundación Conchita Rábago de Jiménez Díaz (mujer del doctor Carlos Jiménez Díaz, que fundó el hospital madrileño que lleva su nombre) entrega anualmente desde 1969 a científicos que han llevado a cabo investigaciones destacadas en medicina y biología. Entre sus galardonados hay 17 premios Nobel.

Es ustedun referente mundial en un tema que podríamos decir que es el "santo grial" más buscado en la Historia de la humanidad. Díganos, ¿podemos ganar la carrera al paso del tiempo?

Es importante matizar que entendemos por "ganar la carrera". No queremos vivir 50 años más de cualquier manera, ni siquiera 5, lo que queremos es que el envejecimiento deje de suponer una pérdida de funcionalidad y de calidad de vida. A modo de ejemplo, nuestro objetivo es que la gente pueda llegar a los 90 pero pudiendo haber corrido una maratón el día antes de morir. ¿Qué forma de vivir mejor? El envejecimiento no es una enfermedad pero si trae aparejadas muchas patologías. Hace 10 años nos planteamos si, en vez de esperar a que surja la enfermedad y tratarla, no era mejor limitar el proceso de envejecimiento, ya que hacerlo retrasaría la aparición de estos problemas. Por decirlo de algún modo, la vejez es como una enfermedad que aún no se ha manifestado, pero si no haces nada, se manifestará.

¿ Y lo están consiguiendo?

Yo soy muy positiva en general, pero objetivamente estamos en un momento en el sí podemos ser optimistas. Hemos pasado una década convenciendo a las agencias reguladoras de que nos deje hacer ensayos clínicos para identificar los marcadores que pueden ayudar a prevenir las patologías asociadas a la vejez. Se están haciendo intervenciones y estudios en todo el mundo, de un modo mucho más practico porque ya hemos identificado los mecanismos asociados al envejecimiento sobre los que se puede actuar. El otro problema era la mentalidad. Hasta hace poco era la del conformismo: "si todos vamos a envejecer, hay que aceptarlo". Esto ha cambiado porque ya no nos resignamos a que, con la edad, aparezcan limitaciones. Obviamente, ha influido mucho el envejecimiento de la población a nivel mundial. La proporción de personas de 65 años o mayores aumenta a un ritmo más acelerado que la de los que tienen menos de esa edad, por lo que no es asumible ni el gasto que supone ni la mentalidad de que no se puede hacer nada.

Han averiguado que medicamentos como la metformina ayudan a frenar el envejecimiento en algunas personas ¿qué avances han conseguido?

La metformina es un medicamento usado para tratar la diabetes tipo 2 que ha demostrado tener propiedades antienvejecimiento en estudios en animales. Hace poco se puso en marcha un estudio multicéntrico, doble ciego, controlado con placebo, el TAME (Targeting Aging with Metformin) en el que se va a evaluar, durante seis años, si esta molécula puede retrasar la aparición de enfermedades asociadas al envejecimiento en personas no diabéticas. ¿Cómo? Pues midiendo una serie de 20 parámetros (como los telómeros, los procesos de limpieza celular, el estrés oxidativo la inflamación, entre otros) pare ver si los sujetos que tomen metformina muestran una caída menos pronunciada que los del grupo control en, por ejemplo, funcionalidad, capacidad mental, etc. El ensayo involucra a 14 centros de investigación en los EE.UU y recluta a 3.000 individuos de 65 a 80 años. De este trabajo podremos obtener biomarcadores del envejecimiento y longevidad que serán de gran utilidad para intervenciones posteriores.

¿Hay otras moléculas que hayan demostrado beneficios?

Si, la carbosa, la espermidina o la rapamicina han mostrado evidencia de ser geroprotectoras. Cada una con sus implicaciones. Dado que son medicamentos que llevan décadas y se han probado en miles de personas, no solo están fuera de patente y son accesibles, sino que se conoce al detalle su nivel de seguridad, sus posibles efectos secundarios. En el caso de la metformina, por ejemplo, se sabe que tiene una toxicidad muy baja. La rapamicina es un inmunosupresor que se usa para "bajar" el nivel de funcionamiento del sistema inmune cuando te van a trasplantar. Las investigaciones con ella se hicieron con muy poca esperanza, pero los resultados fueron asombrosos. Se vio que modular la respuesta inmune disminuía la inflamación, que es un proceso que se cronifica con la edad. Su uso hacía que los ratones vivieran más tiempo y en mejores condiciones

¿Podríamos tener pronto algún tipo de prueba sencilla para prevenir las enfermedades comúnmente asociadas a la vejez?

Pues esa es la idea. El objetivo final es que, con una prueba, que podría ser un análisis de sangre, una persona pueda saber, a sus 30 o 40 años, que tipo de intervenciones (ya sea un tratamiento farmacológico, un cambio en sus hábitos de vida, entre otros) son las indicadas para prevenir los efectos del envejecimiento en su organismo.Buscamos una medicina personalizada, con consejos basados en tu propia fisiología y condiciones, no en pautas genéricas.

La autofagia es su área de investigación ¿qué tiene que ver con términos tan de moda como el ayuno intermitente?

Hace casi un siglo se descubrióen modelos animales (ratones y primates) que si se reducía el número de calorías diarias en un 60%, vivían más, estaban mejor, tenían menor incidencia de enfermedades espontáneas y eran menos frágiles. Aplicar esa reducción calórica a la vida cotidiana es muy duro, y no es beneficioso para todo el mundo, por lo que, desde hacecasi 50 años, se estudian los mecanismos celulares que se ponen en marcha cuando no ingerimos alimentos, así como se investigacómo reproducirlos para lograr efectos beneficiosos. La autofagia es uno de los mecanismos de limpieza celular, por el que todas tus células se deshacen cada día de las proteínas dañadas o tóxicas que tienen dentro. Ese proceso se realiza más eficazmente cuando dormimos y cuando no ingerimos comida durante un tiempo determinado.

También recomiendan dormir las horas necesarias como medida antienvejecimiento ...

Dormir es clave, y no le damos la suficiente importancia. Yo no soy de dar recomendaciones en general porque no tienen sentido. Hay gente que con 6 horas de sueño de calidad se siente recuperado y otras personas necesitan 8. No hay fórmulas mágicas, pero si mucho sentido común. Como decía mi abuela, hay que ir haciendo lo que te pida el cuerpo.

Otro factor clave para un envejecimiento saludable es una actitud positiva, ¿cómo influye?

Bueno, esto es muy interesante y es algo que se ha estudiado en centenarios de todo el mundo. La actitud que tengas ante vida influye mucho en como la vas a acabar viviendo.El optimismo es un rasgo común entre las personas más longevas.A menudo, se relaciona con la capacidad de disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, tomar decisiones con confianza y enfrentar el estrés de manera efectiva. Esta actitud no solo influye en la longevidad, sino también en la calidad de vida, la salud mental y física y la capacidad de adaptarse a los cambios. Al contrario, personas con traumas y que han pasado por acontecimientos negativos en su biografía viven menos y en peores condiciones de salud.

Pero eso no se puede cambiar tan fácilmente...

No, claro, pero en la medida de lo posible, si queremos prevenir, debemos tomar partido y potenciar interacciones sociales positivas en nuestro entorno. No es vida social, que eso en España está muy asociado a comer y beber (ríe), me refiero a, por ejemplo, salir a caminar con un vecina, y charlar a la vez que haces ejercicio. Es clave salir a la calle, oxigenarnos, que nos dé el sol...

Sus hallazgos han sido clave para conocer la biología de enfermedades de gran prevalencia hoy en día como el alzhéimer o el párkinson...

Los sistemas de limpieza celular, cuando no funcionan bien, contribuyen a estas enfermedades y estamos estudiando como algunas de las intervenciones que hacemos para mejorar la limpieza celular se podrían aplicar a este tipo de patologías. También en enfermedades metabólicas (diabetes, obesidad, arteriosclerosis, pérdida de masa muscular), y cáncer. Es un campo en estudio que va a dar muy buenos resultados.

¿Alguna recomendación para terminar?

No hay nada que sirva igual para todo el mundo, pero si sabemos que ciertas intervenciones como espaciar más las comidas y comer menos son útiles.

La gerociencia como cambio de paradigma

Crear un nuevo área de investigación científica no es algo que pase muy a menudo. Gracias a más de 20 años de investigaciones de su equipo en la facultad de Medicina Albert Einstein de Nueva York, Cuervo ha conseguido sentar las bases de un nueva disciplina de estudio, la gerociencia. "La gerontología que yo estudié se basaba solo en tratar de minimizar los efectos de la vejez en las personas mayores, pero no aportaba ninguna solución". Sin embargo, la vejez no tiene por qué ser sinónimo de deterioro. "De hecho, es una etapa de la vida en la que se cuenta con una gran experiencia vital, se tienen menos responsabilidades, más tiempo libre, uno se conoce a si mismo más que nunca... sin embargo, envejecer es el mayor factor de riesgo para padecer enfermedades que reduzcan la calidad de vida". La gerociencia propone un cambio de paradigma: prevenir lo que siempre ha parecido inevitable.