Guía
Deporte en el embarazo: qué ejercicio físico se debe hacer y cuál no
Algunas prácticas pueden ayudar a la mujer gestante a llevar mejor el propio embarazo y a prepararse de cara al parto y al postparto
El embarazo es una etapa muy especial en la vida de una mujer y en la que la futura madre procura, en muchos casos, cuidarse un poco más de la cuenta. Es por ello que la práctica de ejercicio debe formar parte de sus rutinas, salvo que esté contraindicado médicamente. Además, y según los expertos, el deporte durante el embarazo es una primera toma de contacto preciosa con los bebés, pues ellos también lo viven con las futuras mamás.
El doctor Rodrigo Orozco Fernández, jefe de Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quirónsalud Málaga, recuerda que el deporte en cualquier momento de la vida es considerado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una actividad saludable, pero especialmente durante la gestación. “Ahora bien, esta recomendación se mantiene durante el embarazo siempre y cuando se den las circunstancias propicias para que así sea”, incide el especialista.
Así, y por hacer un pequeño resumen de los beneficios más frecuentes que nos puede aportar el deporte durante el embarazo, el doctor asegura que no podemos olvidarnos de que:
- Mejora la condición física.
- Favorece el acondicionamiento corporal y postural al embarazo.
- Permite un mayor control de la ganancia ponderal (el peso).
- Aumenta la elasticidad de los tejidos.
- Aporta mayor rapidez en la recuperación tras el parto y durante el puerperio.
- Fortalece la musculatura del suelo pélvico.
Cuándo no está recomendado
Por norma general, el deporte está permitido durante todo el embarazo, según insiste el jefe de Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quironsalud Málaga, si bien afirma que no es hasta la semana 12 cuando la recomendación empieza a ganar especial valor, ya que en el primer trimestre del embarazo se tienen mayores riesgos de pérdida gestacional, aparte de que la sintomatología acompañante como náuseas, malos olores o aversiones difícilmente incita a la práctica deportiva.
“A partir de este momento, si todo marcha según lo previsto, se podrá reintroducir la práctica deportiva. Existen circunstancias especiales que contraindican el deporte en el embarazo o al menos lo limitan a ciertas prácticas, tales como la aparición de un hematoma placentario, la posición de la placenta por delante del cuello del útero (también conocido como placenta previa), o ciertas patologías o enfermedades que contraindican un sobreesfuerzo a nivel cardiaco u osteoarticular, entre otras”, detalla el doctor Orozco Fernández.
Ejercicios más recomendados
Así, este ginecólogo afirma que prácticamente todos los ejercicios son recomendables durante los meses de gestación, si bien advierte sobre algunas prácticas que pueden ayudar a la mujer gestante a llevar mejor el propio embarazo y a prepararse de cara al parto y al postparto.
En su opinión, cobra una especial relevancia en esta etapa el ejercicio dirigido del suelo pélvico. También sostiene que un deporte “tremendamente sencillo y accesible” a todos los bolsillos es caminar controlando las pulsaciones durante al menos 45 minutos o una hora todos los días. “No debemos olvidar que cualquier deporte que se practique durante el embarazo debe ser siempre en un centro o con profesionales acreditados para trabajo con mujeres embarazadas”, remarca el doctor.
Por otro lado, destaca que también han ganado mucha relevancia en los últimos años la práctica de pilates, yoga, natación o entrenamiento funcional, que no solamente ayudan a mejorar la condición física, sino también a corregir la postura corporal de la futura madre y a soportar mejor el peso del embarazo.
Aquí, el especialista de Quirónsalud Málaga precisa que existen opiniones contradictorias en torno a si se pueden realizar ejercicios de peso durante el propio embarazo: “En principio, siempre y cuando se cumplan todas las condiciones de seguridad y la preparación física sea la adecuada, no debería de existir ningún tipo de problema para realizar estos ejercicios, siempre de forma controlada. El ginecólogo y la matrona pueden orientar sobre si el embarazo es apto para realizar este tipo de ejercicios”.
Asimismo, el Dr. Orozco Fernández cita que la actividad a evitar durante la gestación son aquellos deportes de impacto para personas que no estén previamente acostumbradas a realizarla, ni cuenten con una adecuada preparación.
En este sentido, hace referencia, por ejemplo, a la práctica de crossfit, una actividad de alto rendimiento sobre la que señala que su práctica por una mujer embarazada dependerá de las condiciones de seguridad, pero también de la preparación física adecuada de la futura mamá, acorde al ejercicio que se quiera realizar.
“No debería existir ningún tipo de problema para poder realizar crossfit si la madre lo ha practicado siempre y está preparada para ello. Por eso siempre remarco que es muy importante que los centros donde se realice el ejercicio estén avalados y certificados para poder trabajar con mujeres embarazadas”, reitera el doctor Orozco.
¿Debemos dejar de hacer deporte en algún momento?
No obstante, conforme el embarazo va avanzando hay muchas mujeres que sienten que igual ya no están tan preparadas para realizar ejercicio de forma tan intensa, un hecho que en muchas ocasiones se plantean por el bien del feto.
El jefe de Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quironsalud Málaga considera en este punto que la única forma de conocer esta limitación es acudiendo a los controles programados del embarazo, ya sea en consulta de Ginecología o con la matrona. “Existen exploraciones sencillas para confirmar que el ejercicio que se está realizando es beneficioso tanto para la salud de la madre como para la del bebé. En el caso de que no sea así se establecerán las recomendaciones y limitaciones oportunas”, apostilla.
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