Consumo

La peligrosa silla de niño para el coche que debes devolver

El último análisis de la OCU ha detectado graves problemas de seguridad en este producto

La silla está destinada a niños de entre 61 y 105 centímetros (entre 1 y 4 años de edad)
La silla está destinada a niños de entre 61 y 105 centímetros (entre 1 y 4 años de edad) larazon.es

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), en colaboración con diversas asociaciones (otras organizaciones de consumidores, clubes de automóvil, etc), realiza continuamente análisis comparativos de las sillas de coche para niños que salen al mercado, para comprobar su calidad, eficacia y, sobre todo, su seguridad.

En el transcurso del último estudio, las pruebas del laboratorio han detectado un grave fallo en el anclaje de una de las sillas analizadas: en caso de choque frontal, la silla se desprende de la base y sale proyectada, lo que supone un alto riesgo de lesiones para el niño.

Se trata del modelo Peg Perego Viaggio Twist, una silla recientemente comercializada para niños de entre 61 y 105 cm de altura, es decir, para pequeños de entre 1 y 4 años, que se instala sobre una base (la base Twist), ya sea en sentido contrario de la marcha o a favor de marcha, en función de lo indicado según la altura del niño.

¿Cuál es el problema?

Durante las pruebas de choque frontal en el laboratorio (que simulan un choque a unos 64 km/h, más severo que la normativa R129 de homologación en la que el choque es a 50 km/h), se rompe la pieza que apoya la base de la silla en el suelo del coche, y la silla se desprende de la base y se proyecta hacia adelante y hacia arriba. El problema ocurre tanto cuando la silla se instala a contramarcha como a favor de marcha.

La OCU y el resto de las organizaciones participantes en el estudio de seguridad han informado de este grave problema a la sede central de Peg Perego en Italia.

La compañía ha respondido que investigarán el problema y que han parado la distribución de este modelo de silla, aunque insisten en que este producto pasa las pruebas de homologación de la Norma R129 (menos severas que la de las pruebas en las que participa OCU).

Dado el elevado riesgo de sufrir lesiones en caso de impacto, OCU recomienda a los consumidores que hubieran adquirido la silla dejar de utilizarla y ponerse en contacto con el fabricante para pedir una solución al problema.

En cualquier caso, desde la OCU recuerdan a los padres que es vital para la seguridad del niño que éste vaya en una silla adaptada a su altura o a su peso. Al tiempo que advierten contra la adquisición de sillitas usadas, de segunda mano, a no ser que se sepa con certeza que no ha sufrido un accidente y está en buen estado.