España

Oncólogos denuncian desigualdades entre las comunidades en el acceso a nuevos fármacos

La presidenta de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Pilar Garrido, ha vuelto a denunciar hoy las desigualdades que existen entre los pacientes de las distintas comunidades autónomas en el acceso a los tratamientos más innovadores contra el cáncer. En rueda de prensa para presentar el Congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO 2014), Garrido ha manifestado que entre los profesionales existe un "cierto grado de preocupación"por el tiempo que pasa desde que la Agencia Española del Medicamento autoriza un nuevo fármaco y éste llega a pacientes de todo el territorio nacional.

"Hay decisiones a nivel del Ministerio de Sanidad, pero también de las comunidades autónomas. Tenemos un mapa complejo", ha asegurado esta oncóloga. Por ello, Garrido ha explicado que la SEOM está "haciendo un esfuerzo"en analizar los resultados en salud de los distintos hospitales con el objetivo de disponer de datos objetivos con los que elaborar un mapa de las desigualdades territoriales.

Al respecto, el doctor Ramón Colomer, jefe de servicio de oncología médica del Hospital Universitario de la Princesa, ha explicado que una vez que la Agencia Europea del Medicamento aprueba un fármaco, la introducción del mismo en cada país es distinta dependiendo de cómo esté organizado. En España se prioriza primero la negociación de la financiación, lo que provoca "algunos retrasos"respecto a otros países. "¿De años?, no, pero sí de meses", ha señalado este oncólogo.

También existen diferencias entre las comunidades en cuanto a los cribados, no en cáncer de mama ni cérvix, pero sí en colon, en el que "la velocidad no es homogénea"en la implantación de esta prueba. No obstante, la doctora Garrido ha subrayado que los resultados en salud en España son buenos y están al nivel europeo. Cada año se diagnostican 200.000 nuevos casos de cáncer en nuestro país, de los que mueren 100.000, unos datos que están en consonancia con la media europea.