Mantener la casa caliente en invierno no siempre es fácil y depende de muchos factores, como el sistema de calefacción, el material del suelo y paredes y el tamaño de la casa, entre otros. Pillarle el truco a las condiciones del hogar requiere muchos años de práctica y de prueba y error, y aún cuando pensabas que eras un experto, a veces la calefacción parece no calentar lo suficiente o tarda más de la cuenta en hacer su función.
Preparar los radiadores para el invierno es algo que pocos hacen y que ahorra muchos disgustos a la hora de encenderlos en pleno invierno. Muchos de los problemas que en un primer momento parecen de lo más grave tienen una fácil solución y no requieren ninguna herramienta extraña ni ayuda de un profesional.
¿Cómo hacer que la habitación se caliente rápido?
No es ninguna actividad compleja o un truco de magia. Para mejorar el funcionamiento de los radiadores del hogar los expertos recomiendan equilibrar la temperatura en todos ellos para que sea uniforme. Es un trabajo un tanto laborioso, pero el resultado es una casa con la temperatura ideal y en la que ninguna habitación se convierte en un iglú. Equilibrar los radiadores hace que el hogar se caliente mucho más rápido.
Para hacerlo, hay que abrir las válvulas de los radiadores, apagar la calefacción, poner la temperatura deseada y registrarla en las tuberías. Aunque suene complicado, si sigues los siguientes pasos verás que es más sencillo de lo que parece, pero es importante que dispongas del material necesario. Necesitas una llave de purga, una llave ajustable, destornillador y un termómetro digital. Encontrar estas herramientas requiere tiempo y dinero, pero menos que pagar a un profesional.
Pasos para regular la temperatura de los radiadores
Si quieres equilibrar la temperatura de los radiadores de tu hogar, debes seguir los siguientes pasos.
Apaga el sistema de calefacción.
Purga todos los radiadores.
Verifica el estado de las válvulas de cada radiador.
Haz un esquema sencillo con la ubicación de los radiadores.
Enciende la calefacción y toma notas sobre cómo se calientan.
Apaga el sistema nuevamente y deja que se enfríe.
Vuelve a encender la calefacción.
Ajusta las válvulas del primer radiador según sea necesario.
Comprueba la temperatura del radiador.
Revisa también la temperatura de las tuberías.
Repite el proceso con el resto de los radiadores hasta completar el equilibrado.
Si notas que persiste el problema después de realizar este truco, es probable que sea más grave, por lo que es conveniente recurrir a un profesional.