UE

Meta recula, pero no tanto

La compañía reitera que no tiene intención de abandonar el mercado europeo, pero insiste en mantener el trasvase de datos entre la Unión Europea y Estados Unidos

Centro de datos de Meta.
Centro de datos de Meta.La RazónCortesía de Meta.

El informe de resultados del último trimestre de Meta no ha dejado de dar disgustos a la compañía desde su presentación. A la pérdida en bolsa de una cuarta parte de su capitalización bursátil le ha seguido una tormenta, sobre todo mediática, a cuenta de una advertencia recogida en sus páginas y que no era la primera vez que aparecía en un informe de resultados de la compañía. Y esta era que si la Unión Europea finalmente impedía el trasvase de los datos de los usuarios a Estados Unidos, algo que Meta considera fundamental para su modelo de negocio, “es probable que no podamos ofrecer varios de nuestros productos y servicios más importantes, como Facebook e Instagram, en Europa”.

La declaración fue reportada por muchos medios como una “amenaza” de Meta a la Unión Europea. Aunque ya el pasado lunes un portavoz de la compañía lo negó en declaraciones a Europa Press al afirmar que “no tenemos absolutamente ningún deseo ni planes de retirarnos de Europa”.

Sin embargo, ese mismo día, los ministros de Economía alemán y de Finanzas francés, Robert Habeck y Bruno Le Maire, contestaban con sorna al serles planteada la cuestión en una rueda de prensa conjunta mantenida en París. “He vivido sin Facebook y sin Twitter desde hace cuatro años y ha sido fantástico” dijo Habeck. “Puedo confirmar que la vida es muy buena sin Facebook”, apostillaba Le Maire.

Ahora ha sido Markus Reinisch, vicepresidente de Política Pública de Meta en Europa, quien ha reafirmado la postura de la compañía e intentado suavizar el debate. “Como todas las empresas que cotizan en bolsa, estamos obligados por ley a revelar los riesgos materiales a nuestros inversores. La semana pasada, como lo hicimos en nuestros cuatro trimestres financieros anteriores, revelamos que la continua incertidumbre sobre los mecanismos de transferencia de datos entre la UE y los EEUU representa una amenaza para nuestra capacidad de servir a los consumidores europeos y operar nuestro negocio en Europa”, ha señalado en el blog oficial de la compañía donde también ha recalcado que “no tenemos absolutamente ningún deseo de retirarnos de Europa; por supuesto que no.”

El origen del debate está en la suspensión que decretó el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en 2020 del Escudo de privacidad o Privacy Shield, el acuerdo que regulaba el trasvase seguro de datos entre la Unión Europea y Estados Unidos, debido a que el país que recibe los datos debe ofrecer un nivel de protección equivalente al de la Unión Europea y Estados Unidos no ofrece las garantías suficientes.

“Estas decisiones se han tomado en base a un conflicto entre las leyes de la UE y EEUU sobre la protección de datos. Queremos ver protegidos los derechos fundamentales de los usuarios de la UE, y queremos que Internet siga funcionando como se pretendía: sin fricciones, de conformidad con las leyes aplicables, pero sin estar limitado por las fronteras nacionales”, ha explicado Reinisch.

La situación no afecta solo a las empresas de Meta. De acuerdo con el directivo, el acuerdo Privacy Shield estaba siendo empleado por más de 5.000 empresas a ambos lados del Atlántico y al menos 70 de ellas han expresado su preocupación por la situación actual en sus informes de resultados. Reinisch ha reiterado la necesidad de la transferencia de datos entre Europa y Estados Unidos para operar servicios globales.

“Al igual que otras empresas, marcas y organizaciones comerciales internacionales y europeas, esperamos ver un progreso continuo en las negociaciones para un reemplazo de Privacy Shield para proteger las transferencias de datos transatlánticas, garantizar protecciones de privacidad sólidas y mantener conectadas a las comunidades, economías, empresas y familias globales”, concluye.