Defensa

España, sin plan aún para modernizar sus TOA M-113, el blindado de transporte en servicio desde hace 60 años

La industria española pide al Ministerio de Defensa un gran programa del Ejército de Tierra en 2023 para sustituir a estos vehículos blindados

Un TOA portamortero del Ejército de Tierra
Un TOA portamortero del Ejército de TierraLa Razón

Cuando todo parece estar a punto para que el Ejército de Tierra empiece a recibir sus primeros vehículos de combate sobre ruedas (VCR) 8X8 Dragón, eje del programa Fuerza 2035 donde hará las veces de pilar de la brigada del futuro, se pone sobre la mesa la posible sustitución de otro de los vehículos clave, el M-113 TOA, el transporte oruga acorazado cuyo ciclo de vida ha llegado con creces a su fin.

Durante la celebración del Space & Defense Industry Sevilla Summit 2022, las empresas GDELS-Santa Bárbara Sistemas (SBS), también responsable del 8x8 Dragón, y Escribano Mechanical and Engineering han pedido poner en maarcha en 2023 un gran programa para sustituir a los veteranos M-113.

Y aunque el programa no existe todavía, el Ministerio de Defensa sí lo tiene previsto. De hecho, la propia secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, mencionó en una comparecencia en el Congreso hace unas semanas que se está trabajando en lo que han llamadoVehículo de Acompañamiento al Combate (VAC). Sin embargo, por el momento el programa todavía no está en marcha en la DGAM, por lo que la petición de la industria es de agilidad si se quieren cumplir los plazos, pues se trata deprogramas a desarrollar a largo plazo.

Un programa en estudio sin requisitos definidos todavía

Según informa Infodefensa.com, el Ejército está estudiando los requisitos que deberá cumplir este vehículo para satisfacer sus necesidades. De acuerdo con los planes de Tierra, el reemplazo del TOA M113 por el futuro VAC comenzará no antes de 2027 y está previsto que finalice en 2035. Para ese año, está previsto completar la retirada del servicio de todas las plataformas de la familia TOA M113.

Características

El TOA M-113 puede alcanzar 40 kilómetros por hora campo a través y superar pendientes de hasta 45 grados de inclinación. Además, los eslabones de la oruga poseen tacos de goma que proporcionan un mejor desplazamiento (hasta 60 kilómetros por hora) en carreteras pavimentadas. Está impulsado por un motor General Motors Corporation, Detroit Diésel de 6 cilindros. El peso es de 12 toneladas y tiene una autonomía de unos 480 kilómetros.
La posición del conductor está situada en la parte delantera izquierda, el motor a su derecha, el jefe en el centro y el compartimiento para la tropa en la parte posterior. El jefe del vehículo tiene a su disposición una cúpula que puede girar 360º sobre el plano de acimut y está provista de cinco periscopios M17 y de una escotilla monobloque.
En la parte exterior de la cúpula del jefe se encuentra una ametralladora Browning M2 HB de 12,7 mm con una caja con 100 proyectiles para su uso inmediato, mientras que otros 1.900 disparos de reserva se encuentran estibados en el interior del vehículo. El inconveniente más grave de esta instalación es que no ofrece ninguna protección al jefe de carro frente al fuego enemigo.
10 soldados completamente equipados se pueden sentar, cinco a cada lado, en el compartimiento de tropa, accediendo y saliendo de él a través de un portón accionado mecánicamente situado en la parte posterior del casco, donde también se encuentra una puerta que se utiliza en el caso de que el portalón no se abra. Sobre el techo del compartimiento de tropa hay una única escotilla que se abre hacia atrás.
El sistema de suspensión es del probado tipo de barra de torsión, con cinco ruedas de rodaje con cubiertas de caucho a cada lado, la rueda tractora delante y la tensora detrás. El M113 es totalmente anfibio (aunque sus posibilidades de navegación se reducen a masas de aguas de poca profundidad), siendo impulsado en el agua por sus orugas a una velocidad de 5,8 km/h, previa disposición manual de una plancha rompeolas situada sobre la parte anterior del casco y previa puesta en funcionamiento de las bombas eléctricas de sentina.
El blindaje, de aluminio, magnesio y manganeso, tiene un espesor de hasta 19 mm en las partes menos blindadas y de 32 mm en el frente del vehículo. Este blindaje es aceptable ante proyectiles de fusiles de asalto y fragmentos de metralla, pero no para proteger al vehículo de munición o cohetes antitanque.

Actualmente, Defensa dispone de algo menos de 1.300 unidades de M-113 en sus distintas versiones. Se trata de un vehículo de fabricación estadounidense que entró en servicio a partir de 1963. Existen distintas versiones del mismo: transporte de personal; portamortero; contracarro; lanzamisiles TOW o Spike o ambulancia. Además, hay otros adaptados para ser empleados como vehículos de mando y centros de dirección de tiro (M-577A2); puesto de mando de nivel batallón (M-577A2 PC Bon); porta lanzagranadas; siembraminas M-548/6 SEM; zapadores (M-113A1/A2 VCZ)...

La baja de esta amplia y veterana flota ya ha comenzado. En una primera fase, el plan es jubilar más de la mitad de los vehículos en servicio, pasando de las 1.250 plataformas actualmente operativas a unas 600. Además, el pasado verano se anunció la entrega a Ucrania de 20 unidades.

Con este plan, el Ejército busca adaptarse a los recientes cambios en su organización en el marco del proyecto Fuerza 2035. Dentro del proceso de baja, Tierra ha determinado que las agrupaciones de apoyo logístico de la Brigada Logística sean las unidades de concentración de este material para preparar a los vehículos para la siguiente etapa, su ingreso en el Parque y Centro de Mantenimiento de Sistemas Acorazados número 2 (Pcmasa 2), situado en Segovia. La Aalog 11, por ejemplo, ya ha recibido las primeras unidades procedentes del Regimiento de Infantería Saboya nº 6.

Tierra también ha dejado claro que el futuro VCR 8x8 no viene a reemplazar a los TOA. “El Dragón es un programa cuyo objetivo es sustituir a otra familia de vehículos (BMR-VEC)”, concreta.

La industria pide agilidad

Actualmente, tras el reparto del aumento presupuestario que el Gobierno ha prometido al sector de la Defensa; una de las mayores carencias está en Tierra, donde cuentan con alguno de los sistemas más antiguos de todas las Fuerzas Armadas.

La industria reclama agilidad porque los TOA son sistemas de los años sesenta, curtidos en guerras como la de Vietnam, que probablemente conformen la flota de transportes sobre orugas más grande del mundo, lo que quiere decir que no solo España tiene que sustituirlos. Es decir, si la industria de Defensa española toma la delantera y lo hace bien, podría contar con un vehículo con una increíble capacidad de exportación.

El director general de SBS, Juan Escriña, fue el primero en abrir el debate, sin bien no concretó. “Hace falta un gran programa terrestre para el Ejército de Tierra, que siempre va un poco a la cola cuando hay disponibilidad presupuestaria o cuando parece que hay una época de bonanza”, aseguró.

SBS se presentará a ese programa, en solitario, con el consorcio Tess Defence del que forma parte, o como sea, y si lo hace rápido y bien, podría tener ese VAC disponible cuando otros países comiencen a plantearse el reemplazo de los TOA. Esa posibilidad de exportación marca una oportunidad única para la industria española.

En cualquier caso, los M-113 ya están siendo remplazados en el Ejército Estadounidense por los más modernos Stryker, vehículos con ruedas, más económicos y más fáciles de operar; que además ofrecen prestaciones mejoradas frente a su antecesor.

Modernización de los actuales

Mientras llega este programa, el Ejército de Tierra trabaja desde hace algunos años en una modernización de parte de sus TOA. Este programa afecta a algo más de 700 plataformas de la flota. La actualización comenzó en 2015 y finalizará previsiblemente en 2023. “La modernización se está realizando por los elementos logísticos del Ejército de Tierra, sin otra intervención de elementos externos que la de proporcionar los repuestos necesarios”, detalla el Ejército.

Los trabajos afectan fundamentalmente a la suspensión del vehículo y no incluyen mejoras en el grupo motopropulsor o en la capacidad de fuego de la flota. Respecto a esta última, subraya el Ejército, “se mantendrá y mejorará la capacidad de fuego de las unidades con la incorporación de las nuevas plataformas de combate”.