Estreno

El alma viva de Auschwitz

Canal historia acaba de estrenar «Auschwitz en 33 objetos», serie documental polaca sobre el departamento de conservación del más famoso campo de concentración y exterminio

A pesar de la foto muchos visitantes pasan por alto la importancia de la frase en la entrada de Auschwitz
A pesar de la foto muchos visitantes pasan por alto la importancia de la frase en la entrada de AuschwitzMichal DyjukAgencia AP

Cuando se liberó el campo de concentración y exterminio de Auschtwiz el 27 de enero de 1945, cada ladrillo, cada piedra y cada valla hablaba de los horrores que sucedieron allí dentro desde su apertura el 20 de mayo de 1940, y donde aún resuenan los horrores de las 1.100.000 personas asesinadas. Precisamente para no olvidar todas las almas que sufrieron la locura nazi, en el Día Internacional en Memoria de las víctimas del Holocausto, Canal Historia estrena «Auschwitz en 33 objetos», una serie documental en cinco capítulos que retrata las historias personales que han sacado a la luz desde uno de los talleres de restauración más modernos que existen y el trabajo de la Fundación Auschwitz-Bikernau. Entre los 40.000 metros cúbicos de zapatos, 3.800 maletas, 470 miembros protésicos, 397 uniformes y unas 4.100 obras de arte, se han seleccionado 33 objetos que nos guiarán, junto a las cartas y las recreaciones, a conocer mejor historias de amor, de superación, de horror y de victoria.

De maletas y zapatos

«Hablar de Auschwitz y del Holocausto es una de las cosas más importantes de las que depende nuestro propio futuro», adelanta a LA RAZÓN, Marek Zajac, presidente del Consejo de la Fundación Auschwitz-Birkenau, y recordar ese «horrible pasado, no solo a nosotros, si no para conmemorar a las víctimas». Según Zajac, «la clave es que las personas que están lidiando con esto deberían hacerse una pregunta, ¿qué puedo hacer yo para detener al mal? ¿cómo puedo cambiar el mundo? Incluso el que está aquí a mi lado. ¿Cómo puedo mejorarlo? ¿Cómo puedo convertirlo en un lugar mejor?». Pero también tiene la serie documental un segundo objetivo tras 78 años de la liberación del campo: «Enviar un mensaje a la generación más joven para que la serie tuviera un mayor impacto en ellos». Las piezas efectivamente se alejan de solo volver a contarnos la historia del cartel que da la «bienvenida» al campo «Arbeit Macht Frei» o sobre las alambradas y los barracones. «Queríamos compartir las verdaderas historias conmovedoras que se esconden detrás de los objetos. Mostrar ese tipo de historias que no nos dejarán indiferentes», explica el presidente de la Fundación, que en sus apariciones en cada capítulo también va desvelando el trabajo del taller y del museo, y «mostrar que no es un museo al uso». Allí no hay objetos restaurados si no que los conservan. Rafal Pioro, Director Adjunto del Museo Auschwitz-Birkenau, aclara al diario que «no estamos tratando esos diferentes objetos para recuperarlos, estamos tratando de mostrar de lo que se ha salvado. Solo el contacto directo con el objeto, en un lugar como Auschwitz, es en sí misma la mejor manera de conocer la historia de este lugar».

Los zapatos de Auschwitz
Los zapatos de AuschwitzMiguel BermejoAMC

El espectador descubrirá el sufrimiento de los niños representado en una muñeca, la maleta de la escritora de literatura infantil Elsa Ury, la única puerta de una cámara de gas que se conserva, la matrícula de las SS que facilitó una huida, los mechones de pelo de unos enamorados o la foto de la boda entre el prisionero Rudolf Friemel y su amada, la española Margarita Ferrer. Todos y cada uno de los objetos de la serie documental llevan un trabajo de investigación y documentación que le aporta el valor de la persona que lo poseyó en el campo. «Si quiere que elija un objeto que combine la historia de Auschwitz y el trabajo de la gente del museo, lo tengo», nos confiesa Marek Zajac. Y nos relata el curioso caso del zapato de niño encontrado: «Tenemos más de 8.000 zapatos que pertenecen a las víctimas más jóvenes de Auschwitz. Y uno de estos tenía escrito el nombre del propietario: Amos Steinberg. También constaba su número de transporte». El taller se puso en marcha y consiguieron encontrar que de las dos maletas con el apellido Steinberg pintado, «gracias al uso de una cámara especial, hemos descubierto una especie de descripción adicional en una de esas maletas que coincide con el número de transporte hallado en el zapato del niño. Después de tantos años, dos objetos diferentes estaban realmente conectados entre sí y nos dieron una historia».

Este y otros 32 objetos nos acercarán al día a día de los presos del campo, algunos de los cuales, en malas condiciones, sigue siendo el foco de la La Fundación Auschwitz Bikernau: «Financiamos actualmente el plan global de conservación que nos permitiría asegurar, y salvar este lugar para las futuras generaciones. Estamos trabajando en la preservación de los cuarteles de ladrillo y al mismo tiempo, también estamos conservando los testimonios de todos estos objetos en su estado original».

Recuperación del cartel
Recuperación del cartelAMCAMC

El caso concreto del cartel «Arbeit Macht Frei»

►Es, desgraciadamente, el símbolo más reconocido del Campo de Auschwitz. La inscripción «Arbeit Macht Frei» tiene su propia vida como objeto del campo, ya que representa la venganza de su creador hacia los nazis con la inclusión de un error tipográfico. Además, fue inmediatamente descolgada por los soviéticos que liberaron las instalaciones y se salvó de acabar en la Unión Soviética gracias a unas copas de vodka. O cómo de nuevo en 2009 fue robada por encargo de un neonazi sueco y cortada en tres partes, labor ardua para los conservadores del Museo.