«Es increíble la actitud de Nadal. Sale a disputar el individual, el dobles... A darlo todo», aseguró Roberto Bautista después de ganar su punto en la final ante Felix Auger-Aliassime. El castellonense ayudó al zurdo al triunfo final, como ante Croacia, pero en el resto de eliminatorias, menos en la primera, la presencia de Nadal en pista ha sido necesaria siempre. «Hemos participado los cinco integrantes del equipo y eso le da más valor», decía Nadal sobre la competición en general. Cierto que el triunfo de Feliciano y Granollers en el dobles ante Rusia fue muy importante, pero menos ahí el balear ha jugado todos los puntos posibles. En total han sido ocho encuentros en una semana que para el zurdo y los suyos empezó el martes. Ha tenido que estar en pista 14 horas y 4 minutos para sacar adelante todos sus partidos, sin fallo. El duelo más largo fueron las dos horas y media del dobles contra Argentina, eliminatoria que se decidió en el último set del último encuentro. El más cómodo fue en la misma eliminatoria contra el «Peque» Schwartzman, al que despachó en apenas 60 minutos. Pero su cuenta de partidos no es lo único impecable. En Madrid se ha visto la versión sacadora del tenista balear. «Cañonero» a los 33, se podría decir de él, que siempre ha tenido un saque molesto, por ser zurdo y por su gran cortado, pero no veloz. En los ocho partidos no ha perdido ¡ninguna vez! su servicio. Es más, en los individuales, que han sido cinco, apenas ha tenido que hacer frente a dos bolas de ruptura, contra Khachanov y una ante Shapovalov, que salvó conun primero al cuerpo. En los tres duelos de dobles fueron seis pelotas de break las que tuvo en contra cuando él servía y todas las rescató. Ha sido frecuente ver que en el contador de velocidad de la pista Manolo Santana se vieran primeros servicios del balear a más de 200 kilómetros por hora. 213 ha sido el más rápido. No es que haya conseguido demasiados saques directos, pero sí ha logrado que la pelota no vuelva frecuentemente cuando le restaban.

La Copa Davis era una de las prioridades del número uno del mundo esta temporada. Su lesión enla zona abdominal durante el Masters 1.000 de París-Bercy hizo que sonaran las alarmas, pero pudo disputar la Copa Masters y también estar en Madrid en perfectas condiciones. Un jugador que ha tenido tantas lesiones a lo largo de su carrera y que solía llegar tocado al finald e los cursos lo ha hecho esta vez como un tiro. Sin dolor en las rodillas y jugando un partido tras otro, mientras que Pablo Carreño ha tenido problemas musculares, Marcel Granollers en la espalda, por culpa de los horarios nocturnos, y Roberto Bautista-Agut en el alma, por la pérdida de su padre, lo que le hizo abandonar la concentración unos días, pero tuvo la entereza de volver para ganar un punto muy importante en la final. El calendario seleccionado de Rafa en este 2019 ha sido clave.

Nadal suma la quinta Ensaladera de su historia. Ha estado en todas las de España, menos en la primera, conseguida en 2000. Bueno, al menos en la pista. En esa del Sant Jordi, en la que el referente ante Australia fue Ferrero, era el chico que portaba la bandera en la presentación de los equipos. Después, en 2004, siendo un crío de 17 años, debutó y ganó en Sevilla, aportando un punto ante Estados Unidos. En la priemra ronda de ese año perdió contra Jiri Novak y, ojo, es el único partido en el que ha sido derrotado en individuales en la Davis. Por cierto, en esa eliminatoria acabó siendo el héroe con su triunfo en el quinto y último punto ante Stepanek. 29 victorias yuna derrota en la competición por países, dice su currículum. La siguiente Davis de España fue la de Mar del Plata, en 2008, en la que no jugó la final, pero sí las rondas anteriores. Y las cinco se completan con la de 2009, 2011 y la de ahora.