Turismo

Buenos Aires, la gran urbe que logra emocionar al viajero

La capital argentina nunca defrauda. Diversa, extrema y acogedora, cosmopolita y cercana a su vez, propone mil ciudades dentro de una sola.

Barrio de La Boca en Buenos Aires, Argentina.
Barrio de La Boca en Buenos Aires, Argentina.Dreamstime

Diversa, extrema y acogedora, Buenos Aires es mil ciudades en una sola. Su gente, sus atractivos, su comida, y, entre otras cosas, su música la convierten en una ciudad cosmopolita y a la vez cercana. Buenos Aires es, sin duda, una ciudad apasionada, llena de contrastes y con una gran riqueza cultural. ¿Qué viajero no ha soñado con sumergirse en sus plazas y calles, y dejarse llevar por la atmósfera vibrante del lugar donde nació el sensual tango y que alberga sitios tan históricos como la emblemática Plaza de Mayo?

La Plaza de Mayo, un buen inicio para descubrir la ciudad

Considerada una de las capitales más grandes del mundo, Buenos Aires enamora al visitante con un sinfín de propuestas, de manera que una vez que se conoce, siempre se quiere volver. Comenzaremos por su centro.

La icónica Plaza de Mayo es algo así como el corazón de Buenos Aires; en ella han tenido lugar importantes acontecimientos históricos, y es conocida mundialmente por ser el lugar de encuentro de las Madres de Mayo, una agrupación surgida en la década de los 70 en tiempos de la dictadura para buscar justicia por los detenidos desaparecidos y que, aún hoy, continúan con su lucha por hacer justicia. Bordeando la plaza, se encuentran varios edificios históricos y gubernamentales de imprescindible visita: la Catedral Metropolitana, el Cabildo y, entre otros, la Casa de Gobierno, conocida como la Casa Rosada. En toda esta céntrica zona abundan los museos y otros espacios culturales de interés; y aquí hay que hacer un inciso, ya que aparte de su riqueza monumental, destaca por su ambiente bullicioso y comercial. Su punto neurálgico es la calle Florida, cerrada al tráfico de vehículos, y donde abundan los cafés, restaurantes, librerías, tiendas de ropa…

Un recorrido por algunos de sus barrios más emblemáticos

Si tuviéramos que nombrar una de las visitas más importantes para conocer la esencia de Buenos Aires, sería, sin duda, el barrio de La Boca. Colorido, pintoresco y lleno de vida, su principal atractivo es la llamativa calle peatonal Caminito, tan hermosa e interesante como el mejor de los museos de la ciudad por lo que representa y por ser la cuna del tango. En ella se ubican numerosos restaurantes, terrazas y puestos de pintores, además de bailarines de tango que seducen con la magia de sus pasos. Es un barrio cargado de pasiones y faro cultural de Buenos Aires. La Boca es también muy famoso en el mundo por ser el hogar del popular estadio de fútbol «La Bombonera».

El tango forma parte del ADN de Buenos Aires
El tango forma parte del ADN de Buenos AiresDreamstime

Continuemos por otros barrios inherentes a la historia de la capital de Argentina. Por ejemplo, el barrio de San Telmo es uno de los más antiguos, y sus calles empedradas, de casa bajas y patios con aljibes sugieren una estampa detenida en el tiempo. También es muy conocido por sus bares, tanguerías y, en especial, por la amplia variedad de anticuarios, y, por supuesto, por su circuito callejero del Paseo de la Historieta, donde las esculturas de Mafalda y sus amigos homenajean el humor argentino. En contraste, y como barrio de relativa reciente existencia y muy exclusivo, hay que descubrir Puerto Madero. En él, imponentes rascacielos conviven con algunos tesoros históricos amarrados en sus diques, como es el caso de la fragata Sarmiento, sin olvidar su vistoso Puente de la Mujer, obra del artista Santiago Calatrava. Seguimos por Recoleta, el barrio más elegante de Buenos Aires. Se caracteriza por sus opulentos edificios de estilo parisino y sus abundantes parques, así como por sus grandes espacios culturales, entre los que se encuentra el Museo Nacional de Bellas Artes, y, extrañamente, por su cementerio. El Cementerio de la Recoleta fue declarado Museo Histórico Nacional en 1946, y su gran valor radica en que es una gran exposición al aire libre de diferentes estilos arquitectónicos y esculturales y en que alberga tumbas de gran renombre, como la de Eva Perón.

Por otro lado, no hay que perderse la experiencia de pasear por la que dicen es la avenida más ancha del mundo, la Avenida 9 de Julio. En ella se alza el simbólico Obelisco, emblema de Buenos Aires, y también se encuentra una construcción de gran valor histórico y cultural, el Teatro Colón, uno de los más importantes del mundo por sus representaciones de ópera, ballet y conciertos de música clásica.

Otras visitas imperdibles son la Librería el Ateneo, un antiguo teatro reconvertido que conserva todos sus detalles, como el telón, los frescos de la cúpula y el escenario —que es ahora un café—; el barrio de Palermo; el barrio chino; la Ciudad Universitaria…, es tanto lo que ofrece Buenos Aires, y tan pasional, que es ideal como destino en el que dejarse llevar sin rumbo guiados por la filosofía de que viajar es algo más que recorrer kilómetros. En esta ciudad tan especial sentirá que le envuelve su cultura, su historia, su gastronomía y, por supuesto, sus gentes. Buenos Aires consigue todo esto, y lo más difícil: consigue emocionar.