La Playa de Cádiz con una duna artificial que no deja de crecer

La ciudad más sureña de Europa conserva su fisonomí­a urbana y su trazado de calles estrechas y sinuosas desde hace siglos. El término municipal de Tarifa posee casi 38 kms de playas, la mayor parte de ellas de arenas finas y poco profundas, entre las que destaca la de Los Lances, declarada Paraje Natural y que forma un complejo de playas, dunas, pinares y marismas.

Una parte del interior de su término está incluida en el Parque Natural de Los Alcornocales.También en su término municipal se encuentra la Ensenada de Bolonia, de gran belleza y donde se encuentran las ruinas de Baelo Claudia.

Entre los múltiples atractivos de Tarifa se encuentra una de sus playas más famosas, la playa de Valdevaqueros, de carácter rústica, muy grande, limpia y de aguas azules donde sopla un viento excelente para la práctica del Wind-Surf. De hecho, la playa acogerá entre los meses de septiembre y octubre las pruebas de los Campeonatos de España de Kiteboarding.

Una de las características más espectaculares de Valdevaqueros es la "duna móvil" que la rodea. Se trata de un espectáculo único al que muchos turistas se acercan cada día, en especial, para apreciar una de las más bonitas puestas de sol de Andalucía.

El entorno ha sido objeto de luchas judiciales para mantenerlo "virgen". Tan es así, que la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo confirmó la nulidad Plan Parcial SL1 Valdevaqueros, aprobado en 2012 por el Ayuntamiento de Tarifa (Cádiz), para facilitar la construcción de una urbanización en esa zona costera, junto a la duna del mismo nombre, una zona de incalculable valor ecológico.

La arena lo "engulle" todo. Tan es así, que las distintas administraciones han tenido que impulsar actuaciones para retrasar el avance de la duna de Valdevaqueros sobre los enebrales costeros y pinares, de alto valor ecológico, presentes en la zona y que están sometidos a un enterramiento muy intenso.

En un informe, el Ministerio de Transición Ecológica ha señalado que la actuación humana, unidos a otros factores de orden geológico, como la subida del nivel del mar que tiene lugar desde la última glaciación, y ahora muy probablemente aumentada por el efecto invernadero, han condicionado la actual degradación del sistema dunar.