El Cerro de las Canteras: la ciudad que sí recuerda a Petra

Situada entre el Mar Rojo y el Mar Muerto, Petra estuvo habitada desde los tiempos prehistóricos. En la Antigüedad fue una importante encrucijada de las caravanas comerciales que transitaban entre Arabia, Egipto, Siria y Fenicia. En parte esculpida en la roca y en parte construida en medio de un circo de montañas surcadas por pasos y desfiladeros, Petra es uno de los sitios arqueológicos más celebres del mundo, en el que se mezclan las influencias de las tradiciones del antiguo Oriente y las de la arquitectura helenística.

En el mundo, son muchas las ciudades que tienen semejanzas con Petra y que se autodenominan de esa forma. Entre ellas, a menos de una hora de Sevilla, se encuentra Osuna, dibujada sobre una colina y con un atractivo indudable. Esa elevación se conforma sobre un sustrato rocoso de areniscas calcáreas, que aflora en diferentes puntos del territorio. Esa piedra ha servido desde la antigüedad más remota a los habitantes de esta zona para construir sus edificios.

Tal y como explica el organismo de Turismo de la Provincia de Sevilla, desde hace milenios, el promontorio más elevado ha servido para suministrar los sillares con los que se han levantado casas, palacios, iglesias… Es así que el lugar recibe el nombre de Cerro de las Canteras. Su color ocre y su porosa textura han prestado su colorido y sabor a la ciudad desde los turdetanos hasta mediados del siglo XX.

Estos terrenos de la antigua Urso, de donde se extraía la piedra para las construcciones desde antes de la ocupación romana, es también conocida como la Petra de Andalucía por sus espectaculares relieves en piedra. Sin duda este sustrato rocoso ha sido empleado como cantera de piedra de manera continuada al menos desde época turdetana, aunque parece que su explotación debió intensificarse a raíz de la importante labor constructiva desarrollada por el IV conde de Ureña en el siglo XVI, hasta la década de los años 60 del siglo pasado que se deja de trabajar en ella.

El Coto Las Canteras es hoy un recinto visitable con una entrada única de 4 euros, donde se muestra la tradición y costumbres de la ciudad desde época remota. En él se recoge una colección de enseres y herramientas utilizadas para la extracción y transporte de piedras.

Pero Osuna es, incluso, mucho más. Una parte baja, repleta de plazas, calles y fachadas increíbles, casas señoriales y palacios barrocos; y una parte alta, con más de 3000 años de historia, que utilizaron romanos, musulmanes e íberos para divisar y controlar a posibles enemigos