Sociedad
Tres años del crimen de Palomares: "Las víctimas no pueden estar menos amparadas que los menores delincuentes"
La madre de Jesús Rosado alerta de que "tenemos una ley del menor muy laxa en caso de extrema gravedad"

En el municipio sevillano de Palomares del Río este año no se celebra Halloween. Jesús Rosado Jiménez, de 18 años, fue asesinado cuando regresaba a su casa el 1 de noviembre de 2022. Uno de los autores de su asesinato fue condenado a nueve años de internamiento. La sentencia se quedó a medio camino entre la petición de la Fiscalía y lo que reclamaba la familia del asesinado. El propio juez del crimen de Palomares abogó por juzgar "juntos" a menores y mayores en casos graves y pidió una "reforma legislativa si se quiere una justicia fiable, evitando dos procedimientos paralelos sobre unos mismos hechos". La familia de la víctima clama por un cambio legislativo ante la indefensión a la que se ve sometida.
La madre de Jesús Rosado señaló, en un audio remitido a los medios, que "en todo este tiempo, no se ha cerrado ni siquiera la instrucción del caso". "Quisiera seguir confiando en la justicia, aunque no nos están poniendo fácil", señaló Mamen Jiménez. "A día de hoy, hay al menos tres testigos más que no han sido imputados", lamentó. "Mi familia y yo seguimos trabajando para que la sociedad sea consciente del daño que son capaces de hacer menores de edad. Tenemos una ley del menor muy laxa en caso de extrema gravedad", clamó Mamen Jiménez.
"Desde el asesinato de mi hijo Jesús, han ocurrido solo en Andalucía dos casos más de muertes infringidas por menores. Esto no puede volver a ocurrir. Las víctimas no pueden estar menos amparadas que los menores delincuentes", finalizó la madre de Jesús Rosado en el tercer aniversario de su muerte.
Como ocurrió en el "caso Marta del Castillo", habrá dos juicios por la muerte de Jesús Rosado, uno en la jurisdicción de menores y otro en la de adultos. Manuel C. M., el Cardo, fue condenado a los citados nueve años de internamientos por asesinato y robo con violencia. Está pendiente la vista contra el joven conocido como el Kirro, que era mayor de edad en el momento de los hechos y que está en prisión provisional desde marzo de 2023, con la instrucción sin finalizar y sin fecha para el juicio.
Los padres de Jesús consideran que los miembros de la pandilla que rodearon a la víctima también deben pagar su responsabilidad penal. "A mi hijo lo mataron en grupo, a sangre fría y por el simple hecho de matar. En apenas tres minutos y medio acabaron con su vida sin un sentido. Sólo quiero recordar que hay otros tres testigos implicados que no han sido investigados", dijo la madre de la víctima tras la sentencia.
La madrugada del 1 de noviembre de 2022 fue asesinado el joven de 18 años de edad Jesús Rosado Jiménez, apuñalado mortalmente justo frente a su domicilio de la barriada La Mampela de Palomares del Río (Sevilla).
Según declara probado la sentencia del Juzgado número uno de Menores de Sevilla, confirmada por la Audiencia provincial, la madrugada del 1 de noviembre de 2022, el joven entonces menor de edad enjuiciado por dicha instancia y otro joven ya mayor de edad, contra el cual se sigue otro procedimiento aparte por su condición de mayor de edad, estaban junto a otros tres menores en Palomares del Río armados con una barra o porra de hierro extensible y una navaja; marco en el que abordaron al joven Jesús Rosado Jiménez, de 18 años, cuando "regresaba en solitario hacia su domicilio de la calle Federico Moreno Torroba de la urbanización La Mampela. Sobre las 3:29 horas de la madrugada y cuando el joven estaba ya cerca de "entrar en su domicilio", según el relato de hechos probados, el menor encausado, "con la cara tapada con una máscara; y el mayor de edad, portando uno de ellos la barra extensible de hierro y el otro la navaja"; reclamaron a Jesús que les entregara el dinero y todos los demás objetos de valor que portase; tras lo cual ante la negativa del joven ambos "comenzaron a propinarle puñetazos en la cara y por la espalda".
A continuación, siempre según el relato de hechos probados, "dada la oposición de Jesús, decidieron de mutuo acuerdo atacarle sorpresivamente de manera simultánea y conjunta usando las armas que cada uno de ellos portaba, a sabiendas de que la utilización de las mismas por sus características específicas podía ocasionar la muerte de Jesús y aceptando las consecuencias".
Así, según la sentencia, "uno de ellos le propinó, estando de espaldas y a la izquierda de Jesús, un golpe con la barra de hierro extensible en la cabeza y otro golpe posterior en la zona del costado; mientras la otra persona le asestó con la navaja una primera puñalada en el antebrazo izquierdo", así como "un segundo navajazo que le entró de lleno en la zona del cuarto arco costal izquierdo, pericardio y cara anterior del corazón".
"Como consecuencia del navajazo en la zona del corazón; Jesús cayó desvanecido enfrente de la puerta de su domicilio, al tiempo que tanto el menor como la persona mayor de edad e igualmente" los tres menores que les acompañaban "se dieron a la huida a toda prisa, sin conseguir apoderarse de ninguno de los efectos de valor que llevaba la víctima", que falleció por la herida de arma blanca.
El juzgado expuso que aunque el menor encausado alegase que "su intención era simplemente robar y no hacer daño a nadie y mucho menos matar", tal idea "no puede ser aceptada y no le exime de ninguna manera de responsabilidad".
El juzgado declaró al menor encausado como coautor de un delito de asesinato y de un delito de robo con violencia con uso de armas, en grado de tentativa en el segundo de los delitos; imponiéndole nueve años de internamiento en régimen cerrado complementado con una medida de cinco años de libertad vigilada con asistencia educativa; con la obligación de indemnizar con 140.000 euros a la madre del joven asesinado, con 106.266 euros al padre y con 30.000 euros a cada uno de los dos hermanos.

 
	                 
	                