Un estudio mide el impacto económico de la inmunoterapia en alérgenos

Un ensayo clínico, Ítaca, observa la costo-eficacia de emplear fármacos de última generación en pacientes alérgicos

La cita anual del congreso de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), celebrado esta semana en Valencia, fue el marco para presentar los beneficios de la inmunoterapia específica con alérgenos como el único tratamiento, de eficacia comprobada, existente para tratar la causa de las alergias respiratorias a pólenes, ácaros, hongos y animales. Desde el comité de inmunoterapia de la Seaic, con el apoyo de Merck, se está llevando a cabo un estudio nacional con más de una veintena de centros en el que se pretende analizar el coste-efectividad (comparar el coste de los tratamientos frente a lo que aportan) de la inmunoterapia a ácaros del polvo, de la mano de la doctora Ana Tabar Purroy, jefa del Servicio de Alergología del Complejo Hospitalario de Navarra.

El objetivo es demostrar que el paciente y la Seguridad Social pueden ahorrarse miles de euros en costes directos e indirectos de la enfermedad respiratoria alérgica, además de mejorar significativamente la calidad de vida de estos pacientes. En la actualidad, el estudio Ítaca (www.estudioitaca.com) –que busca evaluar el coste-efectividad del tratamiento con inmunoterapia en pacientes sensibilizados a ácaros, con diagnóstico de asma con o sin rinoconjuntivitis– está en marcha y se ha involucrado a más de 160 pacientes de todo el país. Además, cabe destacar la importancia de este tipo de investigaciones, porque los estudios sobre coste-efectividad que se han realizado sobre inmunoterapia son pocos. Además, la mayoría se han llevado a cabo con pacientes adultos y con rinitis. En Ítaca, los voluntarios afectados serán observados desde seis meses antes de iniciar la inmunoterapia hasta los seis años posteriores a su inicio, para recoger todos los datos posibles.

Otros recursos

En el Hospital de la Candelaria (Tenerife), y bajo la supervisión del doctor José Carlos García Robaina, jefe de servicio de Alergología, se está desarrollando un innovador programa de seguimiento del enfermo alérgico crónico en el que se le da seguimiento y apoyo a cada paciente alérgico, además de formarle y hacerle partícipe en la toma de decisiones del manejo de su dolencia, fomentando la relación entre el médico y el paciente, de manera que la adherencia a su tratamiento sea mejor y de esta manera se alcance el éxito terapéutico.

Con estas herramientas se consigue evitar el incumplimiento terapéutico de las enfermedades alérgicas, y de todas las crónicas en general, ya que supone un problema que lleva como consecuencia al empeoramiento del estado clínico del paciente con deterioro de la calidad de vida, pudiendo llegar hasta la muerte por complicaciones.