Viajes

Gran Canaria al descubierto: los lugares que no puedes dejar de ver al menos una vez en la vida

En sus 1.560 kilómetros cuadrados de extensión puedes recorrer exuberantes montes de frondosa vegetación y playas sacadas de un sueño

Playa de las Canteras, ubicada en Las Palmas de Gran Canaria
Playa de las Canteras, ubicada en Las Palmas de Gran CanariaOficina de Turismo de Gran CanariaOficina de Turismo de Gran Canaria

Gran Canaria es un auténtico tesoro natural, una isla que sorprende por la diversidad de sus paisajes. En sus 1.560 kilómetros cuadrados, puedes recorrer desde exuberantes zonas de vegetación salvaje hasta playas y calas que parecen sacadas de un sueño. Esta isla, considerada una de las ocho maravillas del Atlántico, guarda rincones mágicos por explorar y, probablemente alguno por descubrir.

Ya seas grancanario o visitante, aquí hallarás esos destinos imprescindibles que, al menos una vez en la vida, debes experimentar.

El Roque Nublo y su imponente peña de 80 metros de altura

El Roque Nublo es, sin duda, uno de los emblemas más icónicos de Gran Canaria. Esta formación natural, resultado de la actividad volcánica, fascina a quien se acerca a su imponente peña de 80 metros de altura. Desde su cima, se ofrece una vista panorámica impresionante de toda la isla, que deja sin aliento a los visitantes. Además, en tiempos antiguos, este enclave fue un lugar sagrado para los aborígenes canarios, quienes lo veneraban como parte de su culto ancestral.

La selva canaria de los tilos de Moya

Si tienes la oportunidad de explorar los Tilos de Moya, prepárate para recorrer un sendero verdaderamente fascinante. Este rincón de Gran Canaria alberga una de las últimas muestras de laurisilva en la isla, un bosque subtropical que evoca los paisajes de La Palma, cuna de esta exuberante vegetación. Aquí, entre la frondosidad del bosque, descubrirás un ecosistema único que te transportará a otro tiempo y lugar, lleno de vida y belleza natural.

Un mirador desde donde se ve el mundo

El Pico de las Nieves, el punto más alto de Gran Canaria, se eleva a casi 2.000 metros sobre el nivel del mar, ofreciendo unas vistas espectaculares que quitan el aliento. Es un lugar muy popular entre los visitantes, especialmente para disfrutar de un atardecer inolvidable desde su mirador. Cuando el cielo está despejado, es posible contemplar con total claridad la isla vecina de Tenerife, lo que añade un toque aún más mágico a la experiencia.

Un desierto en Canarias

Otro de los destinos más emblemáticos de Gran Canaria es un paraje natural protegido que, lamentablemente, sufre a diario el desdén de turistas y locales que no siguen las normas. Para disfrutar plenamente de las Dunas de Maspalomas, lo ideal es transitar por los senderos habilitados o, simplemente, quedarse en el mirador, apreciando la belleza sin perturbar el entorno. Ignorar la señalización para tomarse una foto sobre una duna no solo daña el delicado ecosistema, sino que también puede tener consecuencias legales. Sin duda, es un lugar que merece ser visitado al menos una vez en la vida, pero siempre con respeto y conciencia por la naturaleza.

Risco Caído

El Risco Caído, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO, es un lugar cargado de misterio y tradición. Situado en Artenara, sus cuevas han sido testigos de prácticas ancestrales que combinan el conocimiento astronómico con la vida cotidiana. Cada día, cuando los rayos del sol atraviesan este enclave, iluminan de manera precisa un lado de la pared de las cuevas, fenómeno que, en tiempos antiguos, permitía a los habitantes de la isla determinar las estaciones del año y crear un calendario agrícola para gestionar los cultivos. Un lugar único donde la naturaleza y la historia se entrelazan de forma asombrosa.