Cuebas

Cultura recupera los documentos y enseres de la cueva refugio de la Brigada Machado en Liébana

A partir de los materiales, que llevaban 80 años intactos, se han rescatado 40 objetos

CANTABRIA.-Cultura recupera los documentos y enseres de la cueva refugio de la Brigada Machado en Liébana
CANTABRIA.-Cultura recupera los documentos y enseres de la cueva refugio de la Brigada Machado en LiébanaEuropa Press

La Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria ha recuperado los documentos y enseres de la cueva refugio de la Brigada Machado en Liébana, un material que se ha mantenido "intacto durante más de 80 años".

En concreto, esta semana han finalizado las labores de extracción y traslado de los materiales, que han sido depositados en el Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC) para su posterior digitalización y estudio, ha informado el Ejecutivo, que ha indicado que la intervención ha permitido recuperar cerca de 40 objetos de todo tipo relacionados con el uso de la cueva por parte de los guerrilleros que permitirán conocer más sobre sus actividades y sus precarias condiciones de vida. Se han documentado restos textiles y elementos de atuendo, libros, herramientas, recipientes de vidrio, metal o madera e incluso munición.

La Brigada Machado, oficialmente conocida como la 6ª Brigada Guerrillera 'Ceferino Machado', fue una destacada unidad de la resistencia antifranquista que operó en Cantabria y Asturias tras la Guerra Civil Española. Su actividad se extendió desde finales de los años 30 hasta 1957, convirtiéndose en una de las agrupaciones guerrilleras más activas del norte peninsular.

El consejero del área, Luis Martínez Abad, ha calificado de "extraordinario" el hallazgo de esta cueva conocida como Treslasbasnás ya que el análisis de los objetos que guardaba aportará "una serie de datos muy valiosos sobre la historia de esta brigada, pues hablamos de un yacimiento que se ha mantenido intacto durante más de 80 años".

El titular de Cultura ha destacado también la "complejidad" de esta intervención arqueológica, y ha agradecido la colaboración de la Consejería de Presidencia y en especial el Servicio de Protección Civil y Emergencias.

Este apoyo implicó la participación tanto de un helicóptero y su dotación como de un grupo de rescatistas que realizó tareas de apoyo en tierra para asegurar el traslado de los materiales en las mejores condiciones posibles. Además, ha reconocido también la implicación del Concejo de Castro-Cillorigo, de la Dirección General de Montes y Biodiversidad de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria, y del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria. "Todo ello nos da una idea clara del esfuerzo conjunto que, desde el Gobierno de Cantabria, se ha realizado para preservar este patrimonio que nos ayudará a conocer mejor esa época histórica de nuestra región", ha dicho.

Las tareas que el grupo de arqueólogos han desarrollado en esta intervención se han dividido en cuatro fases, habiéndose ejecutado las tres primeras, separadas en el tiempo unos 15 días y con un calendario muy condicionado por la meteorología.

En la primera, se procedió a realizar la documentación geométrica de la cavidad con el fin de obtener un modelo 3D del estado en el que se descubrió, así como una prospección electromagnética y el inventario de los objetos presentes en su interior, complementándose con la revisión de otra cavidad de mayor tamaño situada inmediatamente por debajo, conocida como 'La Bodega' y usada por "los del monte".

Esta cueva, la inferior, sería el refugio principal, usándose la superior en los momentos más críticos para ocultarse, aprovechando su inaccesibilidad e imperceptibilidad.

La segunda fase estuvo dedicada al embalaje, y la tercera, a la extracción de los materiales que ha estado definida por su gran complejidad, condicionada tanto por la propia localización de la cueva, colgada en una pared de 50 metros, como por el acceso hasta el punto de descenso, a través de una estrecha cresta rocosa situada a unos 600 metros sobre el fondo del valle.

Análisis en el museo de Prehistoria y Arqueología

A lo que hay que añadir el efecto del viento, que dificultó en parte la maniobra del helicóptero. Los objetos, que se embalaron siguiendo el criterio y las instrucciones de su restauradora Eva María Pereda, han sido depositados en el Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC), donde serán analizados y estudiados durante la siguiente etapa del proyecto.

Los trabajos de documentación arqueológica de la cueva de Treslasbasnás en el marco del proyecto 'Intervención arqueológica en la cueva refugio de la Brigada Machado' en Liébana' se realizan por encargo de la Dirección General de Cultura y Patrimonio.

El equipo responsable está dirigido por el arqueólogo Rafael Bolado y cuenta con la participación de los también arqueólogos José Ángel Hierro y Jorge Ángel Vallejo, el ingeniero técnico topógrafo Pablo Pérez, el licenciado en Geografía y especialista en historia de la posguerra Valentín Andrés, la asociación 'Desmemoriados', Delia Guardo y Jesús Pelayo, sus descubridores, y el licenciado en Biología, técnico superior en escalada y técnico superior en barrancos Sergio Torío (Altius Aventura). Por parte del Servicio de Protección Civil y Emergencias, participaron los pilotos Asensio Crespo y Pedro Zubizarreta, el operador de grúa Víctor Mazón, los médicos Luis Campos e Ignacio Puente y los rescatadores Manuel Díez, Juan Capa, Sergio Cuesta, Javier Sáenz y Francisco Javier Allende.