Agricultura

Viñedos más eficientes y rentables de la mano de la teledetección por satélite

El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León pone en marcha un ambicioso programa que analiza y monitoriza las necesidades del cultivo en cada momento

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, en los viñedos que hay junto al Instituto Tecnológico Agrario (Itacyl)
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, en los viñedos que hay junto al Instituto Tecnológico Agrario (Itacyl)Wellington Dos Santos PereiraLa Razón

El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) reafirma su apuesta por las nuevas tecnologías aplicadas a la gestión agrícola y ganadera y pone en en marcha un programa de teledetección por satélite con el objetivo de aumentar la rentabilidad del sector vitinícola consiguiendo viñedos más eficientes.

A través del proyecto Vidimag ‘Evaluación de técnicas de monitorización para la gestión integral del viñedo en viticultura de precisión, desde el Itacyl aseguran que estas tecnologías avanzadas, como la teledetección espacial, permiten el análisis de series temporales y monitorizar las necesidades del cultivo para saber qué se necesita en cada momento y conseguir así viñedos más eficientes y, en consecuencia, uvas y vinos de mayor calidad.

Así, y en colaboración con la bodega Martín Berdugo, se llevaron a cabo experimentos de campo en viñedos con espaldera vertical, sistema que se ha convertido en un estándar en la viticultura actual. “Estas investigaciones han permitido analizar sobre el terreno diversos factores como el estado hídrico del cultivo, su función fotosintética, la fenología, la influencia de diferentes suelos y las características de la planta”, destaca el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero.

De forma paralela, se realizaron análisis de imágenes de satélite de la constelación Sentinel-2, de acceso gratuito y gestionada por la Agencia Espacial Europea (ESA), que, mediante la aplicación de técnicas avanzadas de análisis de datos, han servido para analizar la evolución temporal de la parcela de viñedo.

A este respecto, Carnero apunta que “el análisis de las imágenes ha permitido comprobar distintos factores que podrían afectar al rendimiento de cada zona del viñedo para gestionar su superficie de manera diferencial y certificar que los datos estimados por los modelos matemáticos son coherentes y aplicables al viñedo comercial”.

Además, el consejero añade que este nuevo enfoque, basado en las nuevas tecnologías y que requiere de conocimientos especializados, “puede aportar grandes beneficios al viticultor dado que genera un ahorro de tiempo y costes, permitiendo cubrir un área extensa en un instante y gestionar tratamientos y manejos del cultivo de forma diferencial a lo largo de la parcela”.

Importancia de la uva

La viña, vid o parra es una planta leñosa trepadora cuyo fruto, la uva, es comestible y desde la antigüedad se emplea para la elaboración de vino y otras bebidas alcohólicas. En Castilla y León, su cultivo adquiere una importancia notable, tanto por la superficie plantada, que en 2020 rozó las 73.000 hectáreas, como por el valor añadido que genera el proceso de vinificación.

Las catorce figuras de calidad vínicas certificadas en la Comunidad dejan patente la calidad de los vinos elaborados, algo que no sería posible sin una materia prima, la uva, de calidad. Y para obtenerla es necesario un proceso de cultivo perfectamente controlado que permita maximizar la eficiencia de los viñedos.

Todo ello, junto con las cada vez mayores restricciones en el uso de fitosanitarios, convierte la monitorización del cultivo en un proceso fundamental. Debido a la baja rentabilidad del sector agrícola con respecto a otros sectores y a la gran extensión de las parcelas de cultivo, esta monitorización es especialmente difícil sin recurrir al uso de nuevas tecnologías.