Avanzar cuanto antes para contar con la Ley de Víctimas del Terrorismo de Castilla y León

El presidente de las Cortes regionales, Luis Fuentes, ha anunciado que trasladará a la Junta y a los Grupos Parlamentarias su intención de avanzar en el desarrollo e implementación de la Ley de Víctimas del terrorismo, tras mantener una reunión con el presidente de la Asociación en esta Comunidad (AVTCyL), Sebastián Nogales, al que ha mostrado su empatía y apoyo a los cientos de personas golpeadas por la violencia en la Comunidad.

Actualmente, los miembros de la AVT están “encontrando una infinidad de problemas, por lo que vamos a trabajar para que entre todos tengan el reconocimiento de la sociedad castellano y leonesa”, explicaba Fuentes quien recordaba que “las víctimas tienen la Medalla de Oro de estas Cortes y continúan olvidadas” y criticaba que “la escenificación del Gobierno de Sánchez de acercarse a los asesinos, a aquellos que han sembrado el terror durante 40 años”. “Desde las Cortes, desde los representantes de todos los castellanos y leoneses, vamos a hacer todo lo posible para llevar a delante las reivindicaciones de las víctimas”.

Mientras, el presidente de la AVTCyL, Sebastián Nogales, ha valorado este encuentro que tiene como único fin “trasladar a toda la sociedad castellano y leonesa su apoyo”, a la vez que ha pedido el apoyo de las instituciones públicas.

“Soy el representante legal de cientos de víctimas en Castilla y León y de más de 40 años de silencio y terror”, ha afirmado Nogales y ha contrapuesto la visibilidad de los herederos políticos de los asesinos frente a las de sus víctimas. “Él es el representante legal de cientos de asesinos. Pero la pregunta es y ¿ahora qué?”, ha aseverado en relación a las declaraciones del líder de EH Bildu, Arnaldo Otegui. “Las víctimas siempre hemos pedido que nadie sufra lo que hemos sufrido nosotros y que la sociedad empatice con nuestro dolor. Queremos que se sepa la verdad, que no se enmascare o que se pase página, porque entonces se corre el riesgo de cerrar el libro o incluso de quemarlo”, ha finalizado.

Y es que cuando se cumple el décimo aniversario del fin de la violencia etarra, el dolor que sembró la banda terrorista en la Comunidad continúa estando muy presente. De los 857 asesinatos cometidos por ETA entre 1960 y 2009, según se recoge en el libro “Vidas rotas” de Rogelio Alonso, Florencio Domínguez y Marcos García Rey, 138 eran naturales de Castilla y León, lo que supone el 16,1 por ciento del total.

Muchos nombres y que encabeza esta triste lista Gregorio Posada Zurrrón, natural de Villaferrueña (Zamora) y que perdía la vida en 1974. En julio de 1979 la banda terrorista asesinaba al brigada Emeterio de la Fuente Aller y cuatro años más tarde la Comandancia de la Guardia Civil sufría un ataque, sin daños personales.

El año 1992 fue más trágico con un atentado bomba en Lerma que hirió a una niña y en Salamanca fallecía el coronel Antonio Heredero Gil. En 1995 el general Aliste perdía la vida en Salamanca y ese mismo año en León perdía la vida, por una bomba lapa, el comandante Luciano Cortizo.

En 1997 se produjo el cautiverio más largo en la historia de la banda cuando el funcionario de prisiones burgalés José Antonio Ortega Lara, permanecía secuestrado 532 días en un zulo de Guipúzcoa.

Los tres últimos asesinatos de la banda antes de su disolución se produjeron en Capbetron (Francia) donde perdieron la vida dos jóvenes guardias civiles de El Tiemblo (Ávila) y Grulleros (León); y en Santoña, donde era asesinado el brigada Luis Conde de la Cruz de Pinilla Ambroz (Segovia).