El PSOE urge a Mañueco a poner en marcha un plan para recuperar la Sierra de la Culebra

El incendio en la zamorana sierra de la Culebra ha sido un desastre natural sin precedentes, con más de 30.000 hectáreas calcinadas y muchas vidas destrozadas.

La Junta ya ha mostrado su compromiso con los afectados y anunciaba pocos días después del fuego unPlan de Recuperación Económica y Ambiental, que estará dotado con un mínimo de 35 millones de euros. «Estamos de corazón con ellos y responderemos del mismo modo que con el fuego de Ávila, con medidas para los ganaderos y los habitantes de la zona afectada», destacaba el presidente Fernández Mañueco durante el pleno de las Cortes que siguió a este incendio. De hecho, la Junta, ha pedido la declaración de zona catastrófica para poder obtener más ayudas.

Desde el PSOE urgen a la Junta a poner en marcha este plan y exigen a Mañueco que lo tenga listo en dos meses como máximo. El portavoz de Medio Ambiente del grupo parlamentario socialista en las Cortes de Castilla y León, José Luis Vázquez, se ha reunido este viernes con responsables de la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), donde ha pedido a la Junta que ese plan contenga ayudas directas a fondo perdido y no créditos, y que la planificación se lleve a cabo con todos los agentes implicados de la zona.

También preguntaba a la Junta qué va a hacer con las toneladas de madera quemada que se tendrán que retirar, demandaba que en las labores de saca se beneficie a los empresarios de la zona, y apelaba a la necesidad de que se flexibilice el acceso a las ayudas de la PAC por los agricultores y ganaderos de la zona.

Igualmente, pedía un cambio de uso de los montes asolados, que se apruebe una moratoria en los costes de la Seguridad Social para autónomos y empresarios y volvía a pedir la dimisión del consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, por su gestión de este incendio, a quien culpa de que el operativo de extinción siga sin estar operativo al 100 por 100.

Un problema con 50 años

Antonio Jesús Rodríguez, del sindicato agrario, denunciaba, por su parte, que el problema no llegó con el incendio sino con la gestión de la Junta de la zona los últimos 50 años, con repoblaciones con especies foráneas y la desaparición de la ganadería extensiva que limpiaba los montes. “Antes protegían la zona nuestros antepasados y ahora la población está envejecida y nadie explota el monte”, finalizaba.