Zamoranos sin recursos disfrutan de cena solidaria “en familia” de Nochebuena

La agrupación de voluntarios de Protección Civil de Zamora ha ofrecido a personas que viven solas y que son usuarias habituales de los comedores sociales una cena de Nochebuena “en familia” con la que se ha renovado una iniciativa que llevan a cabo desde hace tres décadas y que los dos últimos años no había podido celebrarse por la pandemia de covid-19.

Unas cuarenta personas se han sentado a la mesa en el comedor del colegio Corazón de María de Zamora en una cena que se ha adelantado y ha comenzado a las 18.30 horas para que la veintena de voluntarios que la han servido puedan posteriormente también pasar un banquete familiar de Nochebuena, según ha explicado a Efe el jefe de Protección Civil de Zamora, José Ramón Trigueros.

Después de dos años de paréntesis la implicación en esa iniciativa de decenas de establecimientos comerciales y de hostelería de Zamora no ha variado y se han mantenido las donaciones que hacen posible que las personas sin recursos y sin compañía puedan pasar una cálida cena de Nochebuena.

Al respecto, Trigueros ha explicado que no sólo se trata de servir el menú sino que se pone especial énfasis en que los comensales lo pasen bien, en escucharles, contarles algún chiste o cantar villancicos con ellos.

De esta forma, cumplen con el objetivo con el que inicialmente se puso en marcha esta iniciativa solidaria, que era el de que las personas que vivían solas y acudían a los comedores sociales, en vez de comer en una pensión o en su casa sin compañía la comida que se les proporcionaba en una bolsa para Nochebuena pudieran hacerlo de forma más hogareña.

Gracias a las donaciones de restaurantes, bares y establecimientos de alimentación de Zamora, esas personas han cenado este sábado un menú como el de muchos otros hogares, que han iniciado con unos entrantes a base de embutido, jamón asado, espárragos, empanadas y una ensalada cóctel con langostinos y salsa rosa.

De primero han podido elegir entre crema de marisco, sopa y arroz caldoso de marisco, para luego continuar con un plato de carne y otro de pescado y concluir el banquete con postres típicos navideños y tartas bajas en azúcar para diabéticos.

Además de la alimentación física, que no falta, se intenta dar “una alimentación humana, el calor humano” que todos merecen en Nochebuena, según ha apuntado Trigueros.