Medio Ambiente

Así es el primer proyecto fotovoltaico de Iberdrola en Salamanca

La instalación generará energía limpia suficiente para abastecer a una población equivalente a más de 26.000 hogares

Iberdrola ha finalizado la construcción de su primer proyecto fotovoltaico en Salamanca, el de la planta Villarino, con una potencia de 50 megavatios
Iberdrola ha finalizado la construcción de su primer proyecto fotovoltaico en Salamanca, el de la planta Villarino, con una potencia de 50 megavatiosIberrdrolaLa Razón

Iberdrola ha finalizado la construcción de su primer proyecto fotovoltaico en Salamanca, el de la planta Villarino, con una potencia de 50 megavatios (MW) ubicada en el término municipal de Villarino de los Aires, y ya está inmersa en los trabajos del proceso de puesta en marcha.

La compañía ha destinado más de 33 millones de euros a este proyecto que refuerza el liderazgo innovador y renovable de la compañía en la región.

Esta nueva instalación de producción de energía solar que cuenta con más de 110.000 módulos fotovoltaicos generará energía limpia suficiente para abastecer a una población equivalente a más de 26.000 hogares, además, evitará la emisión a la atmósfera de 12.000 toneladas de CO2 al año.

Su desarrollo ha contado con un importante componente local, tanto de proveedores industriales como por la involucración, en períodos punta de trabajo, de hasta 250 trabajadores, lo que ha contribuido a la dinamización de la economía y el empleo en la zona, según informan fuentes de la compañía.

Iberdrola promueve las energías renovables como motor de desarrollo rural y también en tierras salmantinas tiene previsto invertir 200 millones en construir otra planta fotovoltaica en Ciudad Rodrigo - 318 MW -, una de las mayores instalaciones de este tipo en la comunidad autónoma.

El proyecto de la planta fotovoltaica de la compañía en Miróbriga involucrará a proveedores industriales de la zona y creará hasta 800 puestos de trabajo en periodos punta. Llegará a abastecer a 150.000 hogares y evitará la emisión de 75.000 tCO2 anuales.

En la actualidad, la compañía desarrolla además en la comunidad otras dos instalaciones fotovoltaicas que suman 400 MW -Velilla y Virgen de Areños III-.

En la provincia burgalesa puso en marcha el año pasado su primera planta fotovoltaica de la región -Revilla-Vallejera (50MW), además, ha instalado ya el primer aerogenerador del parque eólico Buniel (104 MW) y está muy cerca de finalizar la construcción de su primera instalación híbrida eólica y solar de España.

Con estos proyectos, Iberdrola refuerza su compromiso con Castilla y León, que se consolida como un centro relevante de desarrollos renovables en el ciclo inversor de la compañía a 2025, donde opera ya más de 5.150 MW, situándola como la comunidad autónoma con más megavatios 'verdes' instalados por la compañía.

Recientemente ha reconocido las mejores iniciativas para la convivencia entre las energías renovables, la naturaleza y las personas en la primera edición de los Premios Iberdrola CONVIVE. El Ayuntamiento burgalés de Revilla Vallejera ha sido uno de los distinguidos por la compañía.

Otras iniciativas sostenibles

Iberdrola trabaja en numerosas iniciativas que conjugan la instalación de proyectos renovables con la conservación de la diversidad biológica de los ecosistemas cuidando flora, fauna y patrimonio natural. En este caso, ha colocado una pantalla vegetal en el entorno de la planta formada por vegetación real y potencial de la zona que servirá para integrar la instalación en el entorno de forma natural.

Asimismo, llevará a cabo la instalación de cajas nidos de carraca, especie en claro declive en la zona, así como cajas de refugio y cría para quirópteros. Construirá también pasillos antiincendios y cuatro depósitos de agua para el apoyo a los equipos de extinción de incendios forestales.

Además, la compañía pondrá en marcha tratamientos selvícolas y repoblaciones forestales, además de con Quercus pyrenaica, con otras especies como Sorbus torminalis, Sorbus doméstica, Pyrus bourgoreana, Malus silvestris, Prunus spinosa, y en las zonas con agua se plantarán Fraxinus sp, Salix

salvifolius y Salix atrocinerea y, en menor medida, Juglans regia y Celtis australis. Asimismo, se han planteado una serie de medidas dirigidas a mejorar el estado de conservación y favorecer los procesos ecológicos del rebollar y su fauna asociada.