Sociedad
Dos años del gran incendio de la Sierra de la Culebra, aún hay madera quemada
La Diputación ha iniciado un proyecto para dotar a todos los núcleos de población de la provincia de un kit básico de extinción con una manguera extensible junto a una boca de incendios y un batefuegos.
Al cumplirse dos años del gran incendio que acabó con la vida de cuatro personas y arrasó unas 31.500 hectáreas de terreno en la Sierra de la Culebra de Zamora las consecuencias aún son visibles y en la zona todavía hay madera quemada sin cortar.
De ese fuego se pueden ver aún en la zona encinas quemadas, mientras del que en la misma área del noroeste zamorano arrasó otras 25.000 hectáreas un mes antes aún hay grandes extensiones de pinares quemados de los que no se ha cortado la madera, según ha denunciado a EFE el presidente de la asociación 'La Culebra no se calla', Lucas Ferrero.
Esta asociación, impulsada por vecinos de la zona afectados por los fatídicos incendios del verano de 2022, lucha desde entonces porque algo cambie y se aprenda de lo ocurrido en aquella tragedia pero su presidente no se ha mostrado optimista.
El fuego podría repetirse en iguales circunstancias
"No ha cambiado nada, lo que se ha quedado sin quemar sigue igual de sucio", ha lamentado para advertir que si se dieran las circunstancias de extrema sequedad del terreno, altas temperaturas y viento volvería a producirse un fuego de similares características al que el rayo de una tormenta seca desencadenó hace ahora dos años.
Pero los graves incendios de la Sierra de la Culebra, un territorio de gran biodiversidad que pertenece a la reserva de la biosfera Meseta Ibérica, sí supusieron un punto de inflexión para realizar modificaciones en la política de lucha contra los incendios.
Lo que ha cambiado
En Castilla y León a raíz de aquellos fuegos se ha incrementado el trabajo de las cuadrillas para facilitar que en invierno lleven a cabo labores preventivas.
En Zamora, la Diputación Provincial ha iniciado un proyecto para dotar a todos los núcleos de población de la provincia de un kit básico de extinción con una manguera extensible junto a una boca de incendios y un batefuegos.
Lucas Ferrero ha recordado que fue una propuesta que realizó la asociación que preside y que puede ser una medida que ayude ya que en su pueblo, Villanueva de Valrojo, cuando se produjo el primero de los dos grandes incendios de la Sierra de la Culebra de hace dos años, tuvieron que apagar las llamas con ramas y unos batefuegos.
Al igual que esos incendios se han ido olvidando con el paso del tiempo, el presidente de 'La Culebra no se calla' ha admitido que también ha decaído el número de voluntarios de su asociación.
Reforestación
Pese a ello continuarán con su trabajo de reforestación que les ha permitido plantar ya unos 9.000 árboles y tener al menos otro millar listo para continuar con esa labor el próximo otoño.
También mantendrán en la memoria con el gran lazo en piedra que realizaron en el primer aniversario del incendio el recuerdo de lo ocurrido y de los cuatro fallecidos: el manguerista Daniel Gullón, el pastor Victoriano Antón, el vecino de Sesnández de Tábara atrapado por el fuego al huir en coche Eugenio Ratón y el voluntario de Tábara al que engulleron las llamas cuando día un cortafuegos Ángel Martín.
✕
Accede a tu cuenta para comentar