Cultura

El festival de la música y el vino que espera desde hoy a más de 120.000 personas

Siete escenarios y más de 150 artistas dan lustre a un certamen en el que tienen cabida todo los géneros y estilos y que ha cruzado también el "Charco"

Actuación de Izal en una edición anterior de Sonorama, en Aranda de Duero
Actuación de Izal en una edición anterior de Sonorama, en Aranda de DuerolarazonLa Razón

Todo está listo y más que dispuesto en la localidad burgalesa de Aranda de Duero, que ya bulle ante el comienzo de su cita más esperada del año, y no solo para los que viven y trabajan en este municipio ribereño, sino para los amantes de la música independiente: el Sonorama Ribera.

El festival de la música y el vino que este año cumple su edición número 26 con ilusiones renovadas y con un cartel de lujo formado por 150 artistas liderados, entre otros, por Amaral, JorgeDrexler, Vetusta Morla, que regresa a «su casa», Trueno, Sidonie, Lori Meyers, Viva Suecia o los emergentes Ayax y Prok, además del rock alternativo de la banda americana Wilco, la única presencia internacional de este año en Sonorama.

Como cada año, la expectación es máxima y se espera la presencia desde hoy y hasta el 13 de agosto, que es hasta cuando se prolongarán los conciertos, de más de 120.000 personas que se repartirán entre los siete escenarios previstos, tres de ellos urbanos, con la Plaza del Trigo como protagonista de excepción en el que se congregan cada año más de cinco mil personas para disfrutar de la sorpresa musical del día, y cuatro en el propio recinto del festival, que este año ha reducido su aforo por seguridad y para que la gente disfrute más de los conciertos. Todos los abonos, más de 32.000, están vendidos desde hace semanas.

«Queremos que la gente pueda celebrar al máximo los conciertos», decía en la presentación el director del festival, Javier Ajenjo, para quien Sonorama Ribera «se ha consolidado» entre los cinco principales festivales de música de España, sobre todo por su versatilidad, ya que se adapta a todos los estilos y género. De hecho, por el escenario arandino, aparte de los artistas emergentes que es el ADN del certamen , han desfilado desde Rafael, el Dúo Dinámico o Camela hasta Nacho Cano pasando por Love of Lesbian, Loquillo, Coque Malla, Alaska o Kiko Veneno.

Javier Ajenjo destaca la juventud que siempre rodea al festival, en el que el 60 por ciento de los asistentes tiene 30 o menos años, y avanza que entre los objetivos del Sonorama Ribera se encuentra también cruzar el océano Atlántico, algo que se está intentando hacer desde hace años dando cabida a las principales bandas de la América Hispana. De hecho, uno de los tres escenarios que hay en las calles de Aranda de Duero, el que está situado en el Parque de la Isla, se ha bautizado como «Charco» para acercar los ritmos latinos.

Pero si algo caracteriza también a Sonorama Ribera es, como su propio nombre indica, su compromiso con lo autóctono. En este caso con los vinos de la Denominación de Origen Ribera de Duero, siempre presentes en esta cita musical del verano, que es uno de los mejores escaparates que han encontrado las bodegas para dar a conocer sus vinos y que la gente les pruebe. En esta edición, los asistentes podrán degustar caldos de hasta 47 bodegas, entre tintos, blancos y rosados que se ofrecerán en dos wine bars distribuidos por el Recinto musical.

Accesibilidad

Otra de las peculiaridades del Sonorama Ribera es su apuesta desde siempre por la accesibilidad y la inclusión para que cualquier persona pueda disfrutar de la buena músico y el mejor vino de la Ribera.

Así, en colaboración con la Fundación Music for all habrá, entre otros sistemas, mochilas que vibran para personas con discapacidad auditiva, balizas de guiado, pantallas en el exterior con signoguías y subtítulos e incluso traducción simultánea en lengua de signos en once conciertos.