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Coronavirus

Colau llama a ensayar el pacto de Estado contra el coronavirus en Barcelona

La oposición se abre a pactar unos nuevos presupuestos pero carga contra su falta de liderazgo

Ayuntamiento Barcelona recibe 12 toneladas de material sanitario de Shangái
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, supervisa la descarga del pedido de 12 toneladas de material sanitario de protección frente al coronavirus.Andreu DalmauEFE

El primer pleno telemático del Ayuntamiento de Barcelona para debatir la respuesta al coronavirus de la ciudad ha dejado entrever la predisposición de la oposición a aprobar unos nuevos presupuestos para hacer frente a la crisis. Los grupos municipales, no obstante, han urgido al ejecutivo municipal a pactar medidas urgentes para paliar las consecuencias negativas de la emergencia sanitaria. Todo ello, en una sesión extraordinaria en la que el gobierno municipal ha advertido que el impacto económico será “brutal” para la ciudad: “No hay precedentes”. Por ello, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha pedido este viernes “mantener el espíritu de coordinación” mostrado por la ciudadanía durante esta crisis sanitaria e impulsar así “un pacto de ciudad” que deberá incluir “unos nuevos presupuestos para una nueva situación”.

Esta mañana, el Ayuntamiento de Barcelona ha celebrado un pleno extraordinario de carácter monográfico -el primero efectuado por vía telemática- sobre la afectación que la pandemia de coronavirus está teniendo en la capital catalana y las consecuencias sociales y económicas que generará esta crisis.

La alcaldesa se ha mostrado “esperanzada” porque el conjunto de las administraciones han dado a esta crisis “una respuesta radicalmente opuesta” a la que se dio a la recesión de 2008, en la que se acentuaron “desahucios, privatizaciones y recortes salvajes”. Ha apuntado que el gobierno municipal “ha doblado” las ayudas sociales a los barceloneses durante esta crisis y ha pedido a la Generalitat “que haga lo mismo”, porque, ha avisado, es lo que requiere este momento.

Oposición

La oposición ha preferido adoptar un perfil más blando que de costumbre. Algunos, por consciencia con la situación actual de Barcelona. Y otros, el independentismo, porque tienen poco de qué presumir tras el escándalo de las residencias de mayores gestionadas por la Generalitat. En este contexto, el presidente del grupo municipal de ERC, Ernest Maragall, ha dicho que el Ayuntamiento “ha dado la talla” como institución pero ha lamentado la falta de “liderazgo” del gobierno de Colau. El republicano ha animado a todos los ejecutivos a “pedir disculpas” porque “todos tenemos responsabilidades”. A pesar de los reproches, Maragall se ha ofrecido a participar “en todas las negociaciones”. Por su parte, el presidente de BCN Canvi, Manuel Valls, ha defendido la colaboración entre el sector público y el privado como base para la recuperación post-crisis y ha hecho un llamamiento a abandonar los “ataques partidistas”. El ex primer ministro francés se ha mostrado crítico con la gestión del gobierno catalán pero pidió mantener la cooperación entre las administraciones. PP y C’s, a su vez, han puesto sobre la mesa la necesidadde reducir la presión fiscal sobre los sectores económicos más afectados por la crisis, como la restauración o el pequeño comercio.