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Coronavirus

El curioso caso de la Cerdanya: una comarca con dos provincias que podría quedar dividida

Quedaría partida con el plan de desconfinamiento del Gobierno: la mitad de sus habitantes no podrían recorrer apenas unos minutos en coche para llegar hasta Puigcerdà, la capital

La comarca de La Cerdanya, en una imagen de archivo
La comarca de La Cerdanya, en una imagen de archivolarazon

La Cerdanya es una de las pocas comarcas catalanas que se mantienen por debajo del umbral de los 50 casos de coronavirus confirmados desde el inicio de la pandemia. En concreto y según datos de la Generalitat, suma 42 contagios, 129 sospechosos y ningún ingreso nuevo en los últimos días entre una población de 18.192 habitantes.

Sin embargo, su particularidad -estar exactamente dividida entre Girona y Lleida- combinada con el plan de desconfinamiento del Gobierno por provincias podría llegar a provocar algunas situaciones surrealistas: un vecino de Bellver (en la parte leridana) no podría recorrer los 17 kilómetros que separan al municipio de la capital, Puigcerdà (Girona), pero sí podría desplazarse hasta Balaguer (Lleida), a más de 130 kilómetros. Y es que 11 poblaciones pertenecen a la provincia de Girona y seis forman parte de la de Lleida.

Más ejemplos insólitos: el centro comercial y empresarial de la zona es Puigcerdà, por lo que todos los vecinos del lado leridano quedarían fuera según el plan de desconfinamiento. Y el hospital de referencia también está ubicado en esta localidad, otro problema añadido en una hipotética desescalada a dos velocidades. “Es imposible que se pueda aplicar, la Cerdanya es una y debemos reivindicarlo”, ha señalado la presidenta del consejo comarcal, Roser Bombardó, en declaraciones a Catalunya Ràdio.

Ante la posible división en dos de una comarca salpicada por pequeños municipios, los ayuntamientos y las administraciones implicadas miran ahora hacia el Ejecutivo y reclaman soluciones.

La Cerdanya, además, también limita en la zona sur con la demarcación de Barcelona y es uno de los enclaves por excelencia de gente con segundas residencias. De hecho y coincidiendo con la primera semana de abril, el Hospital transfronterizo de Puigcerdà cifró en un 20% el volumen de pacientes no residentes atendidos pese al estado de alarma.